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Gladys Pérez afirma que ha sido todo un reto vivir con los animales; estos canes que alguna vez fueron abandonados ahora ya tienen un hogar dónde vivir
Lo que empezó Gladys Pérez como una buena obra terminó siendo una ardua labor a favor de los perros abandonados en la calle. Hoy tiene 21 canes que desde hace cinco años fue rescatando de la indiferencia de la sociedad.
‘No los adoptan porque ya los ven grandes, porque dicen que comen mucho, porque no son de raza, a veces prefiero que se queden porque por lo menos aquí tienen asegurado el cariño y la comida’, señaló.
Gladys es auxiliar contable para una empresa que le permite trabajar desde su casa y estar al pendiente de los perros, sin embargo, su sueldo no es suficiente para mantener a los 21 animales que viven con ella.
GASTOS ECONÓMICOS
‘En lo que más se gasta son en las croquetas, el material de limpieza y sus vacunas. Del material de limpieza quincenal se utilizan tres galones de 10 litros, que son alrededor de 150 pesos, más el cloro, que son 300 pesos quincenal, más las bolsas para recoger las heces’.
Explicó que además de las croquetas le gusta darles arroz con hígado al menos una vez a la semana, esto para variarles su alimentación, por lo que a la quincena compra cuatro sacos de 12 kilos de croquetas que suman mil 800pesos, más los 200 pesos del hígado y el arroz, suma unos dos mil pesos a la quincena aproximadamente.
‘Además se gasta en la aplicación de sus vacunas y desparasitación. Hay dos perritos que necesitan estética que son 120 pesos por cada animal, además del material de baño para el resto de la manada, que no es cualquier jabón, sino uno que sea preventivo contra las garrapatas’.
Gladys reconoció que en varias ocasiones ha recibido ayuda de la gente, pero su compromiso no le permite abandonarlos, pues ‘no puedes abrir la puerta y sacarlos cuando dejas de recibir donativos, aunque te endeudes uno busca cómo hacerle. A veces viene la gente y me pide asesoría contable para sus facturas, y les digo, si te ayudo, pero me traes un kilo de croquetas y con eso me voy manteniendo’.
EL DESTINO Y LA ADOPCIÓN
Señala que nunca pasó por su mente que tuviera bajo su responsabilidad tantos perritos, pero no puede ser indiferente al sufrimiento y abandono de éstos. ‘Cuando los he visto maltratados, enfermos, heridos, hambrientos, no puedo dejar de ayudarlos, no tengo el valor, y es cuando veo si me ayuda mi hijo, la vecina, hasta que logro hacerle un lugar en la casa o buscarle una familia que de verdad lo cuide’.
‘Sí los doy en adopción, pero primero que nada veo que la persona cumpla con los requisitos que es una casa con barda, un techo donde va estar el animal, disponibilidad para que los atiendan y personalmente voy cada tiempo a visitarlos para constatar que están bien cuidados, todo es bajo un contrato que especifica todo, incluso las visitas’, dijo.
Gladys explicó que por el momento no recibe más perritos, porque económicamente le es imposible por eso pide ayuda a la generosidad de la gente para que le apoyen en la manutención de los 21 perritos que tiene.
Información de La Verdad Noticias