Piden limosnas con amenazas en CDMX

09 febrero 2018
Noticias de Yucatán

(SinEmbargo).- “¡Carteras y celulares!… están seguros. No te venimos a robar pero sí te pedimos una moneda, un alimento que te sobre”, es el grito con el que jóvenes entran en los vagones del Metro para, en muchos casos, exigir dinero en forma violenta.
El día ayer a las 23:40 horas, dos jóvenes entraron en la estación Buenavista de la Línea B del Sistema de Transporte Colectivo (STC) para pedir unas monedas. Sin embargo, al notar que un pasajero se reía, uno de los sujetos reaccionó de manera violenta y amenazó con golpearlo.
Unos de los hombres, vestido con una chamarra café y una gorra, se acercó al usuario para amedrentarlo y exigirle que se bajara del vagón para golpearlo.
“Tomó mi acción como burla o como sarcástica y me empezó a decir que si queríamos pelear. Se puso agresivo”, acusó Jorge Antonio Trujillo, el pasajero agredido.
Al ver la actuación del sujeto contra el usuario, los pasajeros jalaron la palanca de emergencias.
Mientras llegaba el conductor, los sujetos se hicieron de palabras con los otros pasajeros alegando que ellos sólo iban pedir dinero, pero el usuario Jorge Antonio se había burlado de ellos.
Pocos segundos después llegó el conductor, preguntó que quién había accionado la palanca y por qué, los pasajeros contestaron que porque el sujeto se había puesto agresivo. Pese al llamado, el conductor sólo se limitó a desactivar la alarma, dejó a los sujetos que siguieran discutiendo con los inconformes y se dirigió a su cabina para cerrar las puertas y continuar el trayecto.
Estaciones después fue cuestionado por SinEmbargo del porqué no había llamado a los policías de la estación, el conductor, de nombre Iván, aseguró que sí los había reportado por medio del radio al Puesto Central del Control (PCC), el cual se encarga de la operación de las líneas del Metro y coordinar los retrasos o adelantos de los trenes, quien le señaló que esperara indicaciones.
“Nada más me dicen que espere indicaciones y que en un momento llegan o a la siguiente estación llega el apoyo”, acusó Iván.
Los usuarios de esta Línea del Metro sufren a diario el ingreso de hombres, que muchas vienen drogados y agresivos, que piden o exigen dinero a los pasajeros.
“En cada estación se sube uno diferente. A veces se suben tranquilos, a veces como ahorita. […] ¿Cómo pueden subir? Yo entiendo que son chavos de la calle que suben pidiendo un peso, comida, pero a veces lo hacen de esta forma también”, señaló Jorge Antonio Trujillo.
Los pasajeros de la Línea B indican que los sujetos suben en su mayoría a los vagones en parejas, y que no hay un solo elemento policiaco en los andenes a esa hora que les impida el paso.


compartir en facebook compartir en twitter compartir en google+

Visitas

Opinión

Elecciones

Nota Destacada