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El diligenciero Marcos Manuel Martín Martínez fue presentado ante un Juzgado de Control por fingir un asalto para quedarse con 873 mil pesos que debía depositar en un banco.
Trabajaba para la agencia de automóviles Hyundai cuando fingió el asalto, ocurrido en diciembre pasado.
Hoy mismo fue imputado por el delito de abuso de confianza por el juez de control Rómulo Antonio Bonilla Castañeda.
Los hechos fueron denunciados por Mauro Fidel Rubalcaba Denis, el apoderado legal para pleitos y cobranzas de la persona moral “Farrera Motors del Sureste, S.A. de C.V.” o Hyundai de Mérida.
Según el expediente, cerca de las 10:30 horas del 13 de diciembre pasado, en el local que ocupa la Hyundai sobre la carretera Mérida-Progreso, la cajera Cinthya Guadalupe Molina Nah entregó a Martín Martínez un cheque y 873,664 pesos.
Asimismo, la encargada de pago a proveedores, Karen Guadalupe Ortega Aké, le dio otros 7 cheques, toda vez que Marcos Manuel desde el 2014 fungía como diligenciero y era el encargado de realizar depósitos en bancos.
Ese mismo día, alrededor de las 14 horas, regresó a las oficinas diciendo que fue asaltado a las 11:30 horas, señalando que sólo le robaron el dinero en efectivo, pero le dejaron los cheques, además de que no le quitaron su teléfono celular, su billetera, y la otra mochila que llevaba.
El gerente administrativo Oscar Arturo Betancourt Cetz, en presencia de la cajera y la encargada de pago de proveedores, le preguntó por qué no dio aviso a la policía, toda vez que tenía el celular y se encontraba cerca de una gasolinera, a lo que respondió que se aturdió.
También le preguntó por qué si lo asaltaron a las 11:30 horas, les avisó hasta las 14 horas, respondiendo de nuevo que no lo hizo porque se aturdió.
La empresa llamó a la policia y fue cuando se supo que fingió el asalto para quedarse con el dinero, aunque se desconoce cuánto se recuperó, pues no se dieron más detalles del caso. Formal Prisión
