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Los desarrollos inmobiliarios, el crecimiento poblacional, construcción de obras, caminos y represas, el dragado de humedales, la contaminación industrial, son algunos de los factores que han provocado la pérdida del 62 por ciento de los manglares en México y en Veracruz el 70 por ciento.
Veracruz cuenta con una superficie de 36 mil 273 hectáreas de manglar con las especies “manglar blanco”, manglar negro”, “Botoncillo” y “manglar rojo”, de acuerdo con información de la Comisión Nacional Forestal (Conafor).
México es el cuarto país con mayor superficie de manglar en el mundo con 524 mil 600 hectáreas que representan el 4.5 por ciento de la cubierta de este ecosistema en el planeta.
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Estos están distribuidos en los estados de Baja California, Baja California Sur, Sonora, Sinaloa, Nayarit, Colima, Jalisco, Michoacán, Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Tamaulipas, Tabasco, Campeche Quintana Roo, Yucatán y Veracruz.
De acuerdo con el gerente estatal de Conafor en Veracruz, José Alfredo Martínez Torres, que en la zona de Alvarado se concentra más del 30 por ciento de la superficie total de mangle en la entidad.
También indicó que Conafor que durante los últimos ocho años han sido invertidos 63.3 millones de pesos para la restauración de 3 mil 130 hectáreas de manglar y humedales en nueve municipios veracruzanos donde se han aplicado 26 proyectos de programas de Compensación Ambiental por Cambio de Uso de Suelo.
Se trata de Acula, Alvarado, Tecolutla, Ixmatlahuacan, Actopan,San Rafael, Tamiahua, Tecolutla y Tuxpan.
RESTAURAN MANGLARES EN ALVARADO
En el Ejido San Juan, municipio de Alvarado se restauraron 112 hectáreas de manglares. Este ecosistema quedó destruido por un incendio que duró tres meses. Los hechos ocurrieron en el año 2010, relataron los pescadores de la localidad.
El gerente estatal de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), José Alfredo Martínez Torres, informó que como parte de la restauración que ha durado varios años, se han logrado sembrar un total de 123 mil plantas.
Se trata de un proyecto de protección y obras de conservación de suelos con la construcción de chinanmpas (área donde se plantan los árboles) y con ello se refuerza el entorno ecológico del sistema lagunar de Alvarado.
La Reserva Natural Arroyo Moreno r se encuentra descuidado y en decadencia a pesar de que desde el 25 de noviembre de 1999 se declaró este lugar como un Área Natural Protegida. Foto: Ilse Huesca, cuartoscuro.
La Reserva Natural Arroyo Moreno r se encuentra descuidado y en decadencia a pesar de que desde el 25 de noviembre de 1999 se declaró este lugar como un Área Natural Protegida. Foto: Ilse Huesca, cuartoscuro
CAMBIO DE USO DE SUELO
De acuerdo con la Comisión Nacional Forestal (Conafor), México es el cuarto país con mayor extensión de manglares en el mundo, con más de 750 mil hectáreas estimadas en 2010. Los manglares se encuentran en los 17 estados costeros del país, en la península de Yucatán es donde hay más.
Los manglares interactúan con el agua de diversas formas. En principio, almacenan agua que puede infiltrarse para recargar el acuífero. Bajo sus raíces se inmoviliza una gran cantidad de materia orgánica y sedimentos, debido a lo cual se constituyen como filtro biológico que atrapa todo tipo de contaminantes como aceites, metales pesados, compuestos utilizados en fertilizantes o plaguicidas del agua de los ríos, antes de que contaminen el mar u otros cuerpos de agua.
Los servicios que prestan son difíciles de monetizar, pero distintas valoraciones señalan que en términos económicos es más factible la conservación del ecosistema, que invertir en costosas plantas de tratamiento o infraestructura destinada a hacer lo que los manglares hacen de manera natural.
Sin embargo, el cambio de uso de suelo para desarrollo turístico, agrícola, acuícola, ganadero y urbano, la tala inmoderada, junto con la descarga de aguas negras, la llegada de contaminantes como pesticidas y derrames de petróleo, han tenido como resultado en la pérdida de cerca del 50 por ciento de los manglares del mundo en los últimos 50 años, según estimaciones de The International Blue Carbon Initiative. Sin embargo
