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El papa Francisco ha separado a tres cardenales de su gabinete informal, dos de los cuales están implicados en los escándalos de abusos sexuales y encubrimiento de la Iglesia.
El Vaticano dijo el miércoles que Francisco escribió en octubre al cardenal chileno Javier Errázuriz, el australiano George Pell y el congolés Laurent Monsengwo Pasinya para agradecerles sus cinco años de servicios en el llamado Grupo de los Nueve, o C-9.
Víctimas de abusos en Chile han acusado a Errázuriz de encubrir a curas depredadores cuando era arzobispo de Santiago, cargos que él ha rechazado. Pell tomó licencia como ministro de economía del Vaticano para responder en un juicio en su Australia natal a cargos históricos de abuso sexual, que él niega haber cometido.
Su presencia en el C-9 había sido fuente de escándalo para Francisco dada la crisis que explotó este año en torno a los abusos y encubrimientos. El Vaticano no mencionó las acusaciones al explicar su partida y dijo que por el momento no serán reemplazados.
La oficina de prensa del Vaticano dijo en un comunicado que los miembros del gabinete pidieron a Francisco en septiembre que reflexionara sobre la futura composición, estructura y tareas del organismo, tomando en cuenta sobre todo la edad avanzada de algunos miembros.
Errázuriz, quien se retiró del arzobispado de Santiago en 2010, anunció públicamente en noviembre que se había separado del grupo. Pell, ausente de Roma desde que tomó licencia en junio de 2017, sigue siendo en teoría el prefecto de la secretaría económica de la Santa Sede.
Francisco creó el C-9 en 2013 para ayudarle a reformar el Vaticano y reorganizar la curia. Ese trabajo está por finalizar con la elaboración final de un documento que establece la misión y tareas de las diversas congregaciones que constituyen el gobierno universal de la iglesia de 1.200 millones de feligreses. Fuente AP
