Los agropecuarios de la ribera
del río Hondo, cansados del constante robo a ganado, se organizaron para
vigilar a sus animales para hacer justicia por mano propia y “linchar” a
los ladrones.
Joaquín Lerdo Montes, productor
ganadero con más de 30 cabezas de bovino en la comunidad de Cacao, dio a
conocer la problemática que han estado padeciendo desde hace cinco años,
señalando precisamente el hartazgo del gremio, que ha visto desaparecer su
patrimonio de esa manera.
“Los productores de ganado de la
zona ya nos pusimos de acuerdo en que si las autoridades no hacen nada por
parar tanto robo de ganado, nos veremos en la necesidad de protegernos entre
nosotros mismos, y en caso de detener a los ladrones, hacerse justicia por
propia mano, porque solamente de esa manera se podría erradicar tanto
abigeato”, comentó.
Señaló que debido a que no todos
tienen recursos para pagar un velador que cuide los ranchos, siguen siendo
víctimas de la delincuencia, quienes prácticamente saquean los ranchos.
“Nos estamos organizando con
productores ganaderos de comunidades vecinas, como Rovirosa, Pucté y Álvaro
Obregón, con la finalidad de avisar cuando se avizore la movilización de
ganado, de manera sospechosa o en horas de la noche”, dijo.
Además, los ladrones no solo se
limitan a robar vacas, sino que una vez en el rancho, se roban equipos de
sistema de riego, bombas para la extracción de agua de los pozos y hasta los
transformadores eléctricos.
La población cree que las
autoridades no han resuelto nada y que solamente sirven para hacer negocio,
porque han visto que si alguien es detenido, sale libre inmediatamente
Armando Martínez Fernández,
productor del ejido Álvaro Obregón, señaló que desde finales del 2018 ya se
habían organizado para crear grupos de autodefensa para proteger el
ganado.
Señaló que en el caso de la
comunidad, se tiene prohibido movilizar algún animal después de las 11 de la
noche, además de que se tiene el apoyo de la Policía Rural, conformada por los
mismos ejidatarios, quienes realizan recorridos en los ranchos al menos dos
veces por semana.
Señaló que aunque se han tenido
infinidad de reuniones a los largo de los años con los representantes de las
diversas corporaciones policíacas, hasta la fecha no existe una estrategia que
dé resultados y disminuya o erradique esta actividad ilícita.
Sipse