En Yucatán existen más de 2 mil cavernas, de las cuales 140 están abiertas al público, en 34 hay evidencias arqueológicas y en 20 hay pinturas rupestres.
Según investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) estas cuevas eran consideradas por la élite maya como un camino al inframundo y dentro de ellas se han encontrado restos y ofrendas funerarias.
En diferentes lugares de las plataformas habitaciones hemos encontrado los entierros”, indicó Concepción Hernández, arqueóloga del INAH.
En la cueva “Los Platanales” al sur de Yucatán, se hallaron los restos óseos de un gobernante maya enterrado dentro de un cista, una especie de rectángulo de piedra con más de 800 años de antigüedad.
Estamos en el platanal donde podemos observar que tenemos restos humanos, es un cráneo y un esqueleto. La forma en que está enterrado, la tumba tiene dos niveles. Se cree que fue un gobernante o un jefe”, señaló Rangel Buenfil, custodio de las grutas Platanales.
Los arqueólogos del INAH señalan que muchos de esos restos ya fueron alterados, ya sea por la propia naturaleza o por la mano del hombre, y eso dificulta la recopilación de información.
Estamos hablando de bienes culturales de origen orgánico que son difíciles de conservar aquí, tiene que ver con los huesos, osamentas, incluso los materiales, los textiles, por ejemplo, es muy difícil de conservar en este clima”, indicó Eduardo López Calzada, delegado del INAH en Yucatán.
Las grutas y cavernas de Yucatán, espacios cerrados en forma de bóvedas, se formaron hace millones de años, fue el refugio de los mayas prehispánicos ante eventualidades y considerados como un punto de comunicación entre dos mundos, el de la vida y la muerte.
Con información de Televisa News.
