Mérida, Yucatán. Prestadores de servicios turísticos y restauranteros de Sisal y San Crisanto, reportan un aumento de hasta el 70 % en afluencia y ganancias después de las 2 primeras semanas del Festival de la Veda 2019, estrategia impulsada por el Gobierno del Estado para promover los atractivos y las actividades turísticas alternativas que permiten a los pescadores obtener un ingreso durante la época en que se restringe la captura del mero en la entidad.
Con estas actividades, el Gobierno que encabeza Mauricio Vila Dosal refrenda el compromiso con este sector productivo de Yucatán, impulsando la economía de los municipios de la costa y sus comisarías a través de actividades deportivas, culturales, sociales y ecoturísticas.
De acuerdo con el reporte de la Secretaría de Fomento Turístico (Sefotur), durante los dos primeros fines de semana de febrero, propietarios de establecimientos de hospedaje, comida y quienes ofrecen recorridos ecoturísticos en Sisal y San Crisanto, notaron una importante derrama económica, como consecuencia de la visita de turistas nacionales e internacionales.
Tan sólo en San Crisanto, se registró una nutrida afluencia de visitantes, poco común en esta época del año, quienes realizaron paseos en lancha, acudieron a los manglares, consumieron platillos locales en los restaurantes de la zona y se hospedaron en las chozas y cabañas disponibles.
A la par de la promoción del amplio abanico de actividades ecoturísticas en la costa yucateca, en el marco de dicho Festival se realizan ventas de artesanías, talleres de elaboración de títeres con material reciclado, conciertos, muestras gastronómicas, proyecciones de películas, cuenta cuentos, limpieza de playas y otras acciones que fomentan el interés por la cultura, el deporte y una mejor relación con el medio ambiente.
Es precisamente el sector ecoturístico uno de los más beneficiados por el Festival de la Veda, ya que la riqueza que nuestro estado ofrece permite congregar una variada oferta de actividades, que va desde paseos en kayak, pasando recorridos en lancha, avistamiento de aves y natación en cuerpos de agua.
Chelem es una de las localidades que en este tercer fin de semana de esta temporada recibió a paseantes locales, nacionales e internacionales que disfrutaron algunas de estas opciones del turismo de naturaleza para conocer la gran riqueza ecológica de Yucatán, la cual incluye una diversa cantidad de fauna silvestre, impulsando la economía de las familias locales.
Manuel Pech Chacón, secretario de la Sociedad Cooperativa Ecoturística de Chelem, señaló que el turismo ecológico se convierte en una actividad muy importante en este periodo de veda para su agrupación, conformada por 11 miembros que desde hace 12 años ofrecen recorridos por la Ría de Chelem en los cuales el turista puede conocer los diversos tipos de manglares, aves y animales acuáticos que ahí se encuentran.
“Junto con mi hija Rosario y la de uno de mis compañeros estamos fomentando estas actividades, para que haya más ingresos para las familias de nuestros asociados. Por ello celebramos el Festival de la Veda en la cual podemos participar, porque como dicen, sino participas no te das a conocer”, acotó.
Por su parte, la comisaria de Chelem, Bianey Chim Pat, señaló que en esta localidad los turistas tendrán más de 100 opciones de alimentos, entre los que destacan los productos derivados del coco, como agua, pays, paletas y las populares cremitas. Además, se cuentan con lugares de estadía para aquellos que quieran disfrutar de la playa, desde unas horas hasta por varios días.
Neify Chim Pat, quien posee un restaurante familiar en ese puerto, también coincidió en que el Festival de la Veda es un escaparate para que las familias yucatecas conozcan los atractivos naturales de su estado, además de que brinda fuentes de ingresos a la gente de Chelem en el periodo de veda de una de las especies más demandadas en el mercado.
José Estrada Chan, de Cabañas Jáal’kab, señala que este tipo de iniciativas vincular a los diversos productores de Chelem, lo cual permite crear una verdadera comunidad en la que todos salen beneficiados.
“El Festival de la Veda nos ha permitido conocer a otros prestadores de servicio, como lo son paseos en lancha, de kayak y venta de artesanías. Estoy seguro que conjuntándonos podremos crecer e impulsar la economía de Chelem”, aseveró.
Chuburná es otra de las comunidades costeras, a pocos minutos de Chelem, en la que se pueden realizar este tipo de actividades con sus propios atractivos particulares, como lo es La Carbonera, una laguna de agua virgen, así como también el camping, la práctica del parapente y el motocross, esto último en el circuito de dunas que ahí se encuentra.
Será hasta el 31 de marzo, período que dura la veda, cuando los hombres y mujeres del mar presten la gran variedad de servicios en sus comunidades costeras, con el fin de tener otras formas de ingreso para sostener a sus familias.