Una llamada telefónica advirtió a la Policía de California, en Estados Unidos, y arrancó una investigación, luego de que un adolescente de 15 años denunció haber tenido una “relación inapropiada” con una mujer de 40 años, quien además es la madre de su novia.
Las autoridades investigaron el caso y pocos días después se agregó un segundo testimonio: otro menor, esta vez de 14 años, quien también denunció a la mujer y aseguró haber vivido una situación similar. Este chico era, además, el novio de la otra hija de la acusada.
Se trata de Coral Lytle, casada y madre de cuatro hijos, que según trascendió, manejaba 24 kilómetros desde Tulare hacia Visalia para encontrarse con cada menor. Según declaró el mayor de los chicos, la mujer le proporcionaba cigarrillos, alcohol y lo hacía ver pornografía.
El adolescente también confesó haber tenido relaciones sexuales con la mujer en tres ocasiones, pero detuvo estos encuentros porque, según declaró, sentía culpa cuando se cruzaba y saludaba al marido de la acusada.
El caso salió a la luz a raíz de la denuncia del menor en octubre de 2017 y la mujer fue investigada inicialmente por 21 cargos de delitos sexuales. Su marido le pidió el divorcio y ella fue arrestada.
Se esperaba una condena dura para Lytle, ya que después de una audiencia preliminar en marzo de 2018, en la que los testigos brindaron un testimonio detallado sobre el abuso, el juez Brett Alldredge dio una sentencia de tres años de prisión.
Pero como ella no quiso admitir sus crímenes, el juez Joesph Kalashian optó por cambiar la estrategia y le dijo a los abogados de Lytle que si la mujer se declaraba culpable de los cargos, él ofrecería una sentencia de prisión de seis años en libertad condicional. Es decir que si ella violaba ese acuerdo pasaría los seis años completos tras las rejas.
Lytle aceptó, admitió los cargos vinculados al abuso sexual de menores y desde este mes la sentencia quedaría firme. Pero este lunes todo volvió a cambiar. Después de revisar el informe de libertad condicional, el juez Kalashian dijo que no creía que la sentencia estuviera bien por lo que decidió demorar el caso.
De esta manera se programó una nueva audiencia para el lunes siguiente, 22 de abril, y a Lytle se le permitirá retirar su declaración de culpabilidad.
La mujer, quien actualmente tiene 41 años y se encuentra en libertad, ahora puede modificar su presentación y en la próxima instancia judicial volver hacia atrás y negar los hechos como si nada hubiera sucedido.
Con datos de Milenio