En la semana del 29 de julio al 2 de agosto el peso cerró con un retroceso de 1.39 por ciento o 26.5 centavos, la mayor depreciación semanal desde la última semana de mayo, cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump amenazó con imponer aranceles a las importaciones provenientes de México.
Para Banco Base, esta baja en la moneda nacional se dio debido a que la Reserva Federal (Fed) fue menos acomodaticia de lo esperado.
El miércoles pasado, el presidente de la Fed, Jerome Powell, señaló que, aunque podría haber otros recortes a la tasa, no se trataba del inicio de un largo ciclo de recortes a la tasa de interés.
La aversión al riesgo se elevó en los mercados financieros globales, después del anuncio de Trump se da en un contexto en el que las conversaciones comerciales más recientes no lograron avances.
La entidad financiera destacó que como resultado de la guerra comercial durante el primer semestre de 2019, las exportaciones de bienes de Estados Unidos hacia China han caído 12.4 por ciento respecto al mismo lapso del año anterior; su peor retroceso desde 2009. Por su parte, las importaciones han caído 18.9 por ciento.
Hacia el cierre de la semana, abundó, se publicaron indicadores económicos favorables para Estados Unidos, como la nómina no agrícola mostró la creación de 164 mil posiciones laborales, dato que se ubicó cerca de las expectativas del mercado y que es señal de fortaleza del mercado laboral.
Agregó que la tasa de desempleo se mantuvo en 3.7 por ciento, mientras que los salarios promedio por hora crecieron a una tasa mensual de 0.3 por ciento, por arriba de lo esperado.
De acuerdo con los indicadores económicos, la moneda mexicana sigue vulnerable a la especulación debido a las expectativas económicas desfavorables para México.
A media semana, se dio a conocer que la economía mexicana creció a una tasa trimestral de 0.1 por ciento durante el segundo trimestre, evitando que se confirmara una recesión técnica, según cifras oportunas.
Sin embargo, es el tercer trimestre consecutivo que el PIB muestra un crecimiento trimestral cercano a cero, por lo que un ajuste moderado a la baja en su revisión final podría ubicarlo en terreno negativo.
Respecto a la situación de la economía mexicana, al cierre de semana se dio a conocer el sistema de indicadores cíclicos para mayo, en donde, se observó una disminución del índice de 1.5 puntos durante mayo, la mayor para un mes desde abril de 2013.
Con ello, el indicador acumula ocho meses por debajo del último máximo en septiembre de 2018 y en la semana que recién concluye, el tipo de cambio alcanzó un mínimo de 18.9507 y un máximo de 19.3730 pesos por dólar.
Notimex.