Rosa Elena Bonilla, esposa del expresidente hondureño
Porfirio Lobo (2010-2014), fue condenada este día a 58 años de prisión, tras
ser declarada culpable de los delitos de apropiación ilícita y fraude,
informaron fuentes judiciales.
El Tribunal de Sentencia en Materia de Corrupción de la
Corte Suprema de Justicia (CSJ) impuso a Bonilla 10 años de cárcel por el
delito de apropiación indebida y seis años por cada uno de los ocho delitos de
fraude, para un total de 58 años de reclusión.
Portavoces del tribunal indicaron que la ex primera dama, de
52 años, deberá pagar además una multa del 10 por ciento del valor apropiado.
Mientras que su exsecretario, Saúl Escobar, fue condenado a
48 años de cárcel por ocho delitos de fraude, señaló el diario local La Prensa.
Después de que el proceso en su contra finalizara en abril
de este año, la ex primera dama fue declarada culpable el 20 de agosto pasado
por un tribunal en materia de corrupción.
El juicio oral y público contra la ex primera dama duró 11
semanas y en él se presentaron más de 143 pruebas, que incluyó la revisión de
122 documentos y el testimonio de 14 testigos.
Las investigaciones contra Bonilla se iniciaron en 2018,
tras una denuncia de la Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en
Honduras (Maccih), que aseguró que la esposa de Lobo se apropió de fondos que
pertenecían a la Unidad de Desarrollo Comunitario del Despacho de la Primera
Dama (Udeco).
De acuerdo con la Maccih, Bonilla se apropió de más de 12
millones de lempiras (unos 510 mil dólares) de la cuenta de la oficina del
Despacho de la Primera Dama y los transfirió a una cuenta personal, días antes
de que su esposo dejara la Presidencia de Honduras, en enero de 2014.
La Maccih también denunció que se emitieron más de 70
cheques a nombre de nueve personas, quienes se encargaron de hacer los fondos
efectivos.
Tras la lectura de la condena, la defensa de Bonilla tiene un plazo de 20 días para interponer un recurso de casación ante los órganos judiciales correspondientes.