Las fracciones de Morena en el Congreso de la Unión han
presentado más de mil iniciativas en lo que va de la 64 Legislatura, de las
cuales menos de la mitad se han avalado y han avanzado en su proceso
legislativo.
En la actual Legislatura, Morena cuenta con 60 senadores y
258 diputado federales, una mayoría que no se veía desde 1997, cuando el PRI
tuvo por última vez un grupo parlamentario tan grande.
En el primer año legislativo, que inició en septiembre de
2018, los diputados morenistas presentaron 489 iniciativas, de las cuales sólo
se dictaminaron 106 (65 de forma positiva y 41 de manera negativa).
Entre las avaladas, destacó el dictamen que expidió la Ley
de Austeridad Republicana presentada por el diputado Manuel Rodríguez González
(Morena) y avalada en una segunda vuelta en la Cámara de Diputados, con 321
votos a favor.
Una reforma que quedó frustrada —que tanto diputados como
senadores pretenden retomar en el periodo que inicia hoy— es la que busca
eliminar por completo el fuero para servidores públicos, así como el Presidente
de la República.
La iniciativa fue presentada por el Ejecutivo federal el 4
de diciembre de 2018 y se avaló el 27 de marzo de 2019 en el pleno del Senado
de la República. En la Cámara de Diputados, la minuta no generó el consenso
necesario que requiere una reforma a la Constitución y fue devuelta con cambios
a la Cámara Alta.
Pese a eso, en octubre de 2019, cuando se avaló que el
Mandatario pueda ser acusado de corrupción y delitos electorales, las bancadas
de Morena, Partido del Trabajo y Encuentro Social celebraron que se trató del
“fin del fuero”.
En lo que va del segundo año de actividades de la 64
Legislatura, los diputados federales han presentado 412 iniciativas, de las
cuales han avanzado sólo ocho: siete de forma positiva y una en sentido
negativo.
Desde que inició la Legislatura, los senadores han
presentado 523 iniciativas, pero sólo 66 han iniciado su proceso legislativo en
comisiones; 54 han sido aprobadas, y 12 concluidas en sentido negativo.
Conflicto interno
En entrevista, el designado presidente interino de Morena,
Alfonso Ramírez Cuéllar, afirmó que el partido se ha disminuido en sus
propuestas y que no logran hacer punto de apoyo a las que desde el gobierno se
envían.
En ese sentido, Víctor Alarcón, analista político y profesor
de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) comentó que con los números que
posee Morena como mayoría parlamentaria en el Congreso, debería tener mayores
logros, tanto cualitativos como cuantitativos.
“Para los números que tienen, si bien han pasado un conjunto
de iniciativas no menores, sí me parece que están muy por debajo de lo que, de
manera sustantiva, pudieran haber logrado en otras condiciones.
“Creo que la crisis interna del partido sigue siendo un
factor de riesgo que, de no resolverse, podría extenderse y obligar a que el
gobierno y las Cámaras sigan trabajando de manera aislada, sin una dirección
política”, mencionó.
Al respecto, el académico del Tecnológico de Monterrey José
Fernández Santillán consideró que la falta de pericia política para destrabar
algunas propuestas legislativas se debe a la poca profesionalización de quienes
fungen, sobre todo, como diputados federales.
“También tienen errores garrafales de presentar iniciativas
incompletas, mal preparadas, de no respetar los tiempos de la reglamentación,
de repetir propuestas. Todo eso refleja el conflicto interno que hay en el
partido.
“Lo mismo pasa en las legislaturas locales, [de las cuales]
Morena ganó 19. Si así está la composición del Poder Legislativo a nivel
federal, nomás hay que imaginarse cómo está a nivel local”, explicó.
Ambos expertos advirtieron que Morena debe terminar con los
grupos que se trasladaron, a través de sus líderes, desde el Partido de la
Revolución Democrática (PRD) —conocidos como tribus—, pues eso merma la
resolución de conflictos.
“Es un dilema que demuestra que, aun siendo el partido
gobernante, no está integrado ni unificado. Menos se refleja que el presidente
[Andrés Manuel López Obrador] tiene el control del instituto.
Estos grupos deben unificarse”, aseguró Fernández Santillán.
“[Morena] es un partido de orígenes muy diversos, a pesar de
que el núcleo dirigente venía, sobre todo, del PRD.
“Creo que no han sabido lidiar con estas dinámicas, con este
estilo de cultura política que ya venían arrastrando de [otras] corrientes”,
expresó Alarcón.
Fuente: El Universal