Gilda Alicia estaba recargada en un auto cuando dos hombres dispararon en contra de ella. Tras ver que la mujer aún se movía, uno de los atacantes la remató.
El ataque ocurrió ayer a las 10:30 de la mañana en calles de la colonia Pedregal de San Nicolás, en la alcaldía de Tlalpan.
La mujer, de 30 años, se encontraba recargada en la cajuela de un Jetta negro —en compañía de otro hombre—, sobre la calle Suszal, cuando arribaron cuatro sujetos a bordo de un coche Nissan Versa.
Dos de ellos bajaron y se dirigieron a Gilda Alicia para dispararle. Al escuchar los balazos, ella quiso huir. No lo logró porque una bala la derribó. Al verla herida, uno de los homicidas se acercó y sin decir nada le dio un tiro en la cabeza. En total fueron ocho los disparon que se escucharon.
Los vecinos reportaron el ataque a los servicios de emergencias. Al lugar llegaron policías, quienes al ver a la mujer herida pidieron una ambulancia.
Al arribar los paramédicos, sólo informaron que ya había muerto. Al sitio también llegó un hombre, quien se identificó como el padrastro de la víctima. Ante los agentes reconoció el cadáver de Gilda Alicia, pero les mencionó que desde hace dos años no tenía contacto con ella, por eso desconocía sobre sus actividades.
El cadáver fue trasladado al anfiteatro de la agencia ministerial. En cámaras de seguridad quedó grabado el ataque y las características de los agresores, por lo que las autoridades ya los buscan.
En el lugar de los hechos, los agentes encontraron ocho casquillos de calibre 9 milímetros.
