Ciudad de México.- Al shock de tener un familiar fallecido
por Covid-19 se suma el drama de ya no verlo desde que entra al hospital. El
dolor se recrudece cuando, al fallecer, tampoco es posible velarlo ni
sepultarlo.
A la tragedia hay que añadir que algunas funerarias prometen
a los clientes un espacio en un cementerio, pero tras acordar el servicio, ya
con el cadáver en la carroza, se les informa que no es posible la sepultura
y se debe llevar el cuerpo a un crematorio.
"Es muy triste, quedarse uno sin el ser querido y sin darle una despedida,
realmente desde que entran al hospital por Covid-19 ya no los vuelve a ver
uno, nuestro familiar estuvo hospitalizado cuatro días, no lo vimos, luego con
el tema funerario, pues nos agarraron en curva.
"Nos ofrecieron todo (la funeraria), una caja, que se
puede velar con ocho familiares nada más por la contingencia y al final de
cuentas nos dicen que no se puede, que por instrucción oficial se tiene que
cremar y lo dicen cuando se pagó todo el servicio", dijo un familiar de un
fallecido, un trabajador administrativo del Hospital de Ticomán.
El familiar lamentó que la madre del hombre que murió por Covid-19 aún tiene
la idea de que su hijo va a regresar.
"No lo ha visto y no lo vio (en el hospital), las cenizas las tiene mi
esposa, que es hermana del fallecido, y aquí tenemos las cenizas hasta que haya
un espacio digno donde ponerlas", añadió.
El familiar del fallecido indicó que la prueba aplicada al paciente en el
Hospital de Ticomán dio positivo a Covid-19 y murió tres horas después.
La victima, de 51 años, laboraba en el programa del Insabi en el mismo
hospital.
"No tenía ninguna prestación, laboraba por honorarios, pero realmente
fue riesgo de trabajo, es lo que vamos a pelear, porque en su caso fue
riesgo de trabajo o negligencia médica, pues al principio dijeron que era una
faringitis", reprochó.
En tanto, en la funeraria del IMSS de la Colonia Americana,
en Guadalajara, el personal señaló que por consejo de expertos se
limitaban a usar guantes, puesto que los cadáveres ya no producían gotículas.
En contraste, en funerarias privadas aseguran que protegen a su personal, pero
les ha resultado complicado conseguir los insumos necesarios.
De acuerdo con la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios en el
Estado, desde el 13 de marzo se informó a las funerarias cómo debían
manejar los cuerpos de las personas que fallecieron a causa de Covid-19 o
neumonías secundarias al virus.
Se les pidió usar mascarillas o cubrebocas de tres capas, goggles, guantes,
batas largas y botas.