Hace unos meses, al inicio del actual gobierno, señalé que los recursos de los trabajadores en las Afores eran una gran tentación, y podrían ser utilizados para otros fines si las cuentas no cuadraban.
El enojo del titular del agente regulador fue monumental tachándome de irresponsable y especulador. Sigo pensando lo mismo porque cada vez más, las cuentas simplemente no cuadran, y se quieren hacer milagros con una simbólica reducción de salarios a los altos puestos gubernamentales. Estos recortes significan unos cuántos pesos que ayudan en muy poco, por no decir que nada, a una solución de fondo de los gravísimos problemas que ya padecíamos y que serán mucho más graves en los siguientes meses, por obvias razones.
Uno de esos graves problemas será el desempleo
Para resarcir mi “especulación e irresponsabilidad” de hace unos meses, ahora sugiero que el gobierno federal tiene en sus manos una gran oportunidad para paliar los efectos negativos del tsunami de desempleo que se viene, o que incluso ya está aquí.
Este es quizás el momento histórico para que el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) en general y las Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro (Afores), en particular, demuestren la valía que tienen para millones de mexicanos y enfrenten con acciones concretas el desempleo que golpeará a miles o quizás millones de mexicanos.
Acciones del SAR con base en las leyes vigentes
Como señalamos, el SAR en general y las Afores en particular tienen una gran oportunidad.
El mecanismo de hecho ya existe, se trata del seguro por desempleo, implementado en esas épocas en las que, según la actual administración “todo se hizo mal”.
El seguro por desempleo es un beneficio del que se supone que gozan millones de mexicanos que tienen cuenta en alguna Afore y al que pueden acceder bajo ciertas condiciones.
La condición principal es el tiempo. A este seguro solamente se puede acceder una vez cada 5 años, lo que se hace, según la Consar, para evitar que los fondos sean utilizados sólo para pago por desempleo, además de que permite acumular en ese tiempo recursos para que, llegado el momento, el trabajador pueda obtener mayores montos por concepto de dicho seguro.
Las medidas en lo personal me parecen acertadas, a pesar de haberse realizado en esas épocas en las que “todo se hizo mal.”
Sin embargo, esta administración puede dar un giro al respecto, aunque sea temporalmente, precisamente para proteger los ahorros de los trabajadores, pero al mismo tiempo utilizarlos con toda contundencia en momentos como los que vivimos.
La idea es dar liquidez a los trabajadores (ya que no se quiso dar liquidez a las empresas para que no los despidieran), lo que al gobierno no le costaría un solo centavo, ya que todos los recursos saldrían de los ahorros de los trabajadores en las Afores, los ahorradores mexicanos se pagarían su propio seguro por desempleo.
