Desde el viernes en la tarde, en Caborca, Sonora, una batalla campal dejó 12 ejecutados.
El sábado fue la imagen de Guanajuato en llamas, con narcobloqueos y balaceras, tras la captura de la mamá del “Marro”, considerado el principal huachicolero del país, al grado que Estados Unidos recomendó a sus ciudadanos no moverse por ahí.
El domingo, emboscaron y ejecutaron a 6 policías en Guerrero, y encontraron 75 bolsas con restos humanos en Jalisco.
El lunes, 13 hombres y 2 mujeres fueron torturadas y quemadas vivas, a las afueras de Salina Cruz, Oaxaca.
El viernes en la mañana el presidente había aceptado que él ordenó liberar al hijo del Chapo Guzmán, con lo que cambió la versión oficial (una mentira que mantuvo ocho meses).
El jueves en la noche publicamos el reportaje #RegalazoParaIrmaEréndira en el que se cuestionan origen y valor de las propiedades de la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval, y su esposo; el asunto se volvió un escándalo que mereció una embestida gubernamental. El viernes tres mujeres renunciaron al gobierno: Conapred, Comisión de Atención a Víctimas y subsecretaria de Salud.
El domingo se supo que los ingresos del secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, se triplicaron en un año, al pasar de 2 a 7 millones de pesos, y también crecieron los de la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, todo con base en sus declaraciones patrimoniales.
El lunes, la popularidad del presidente alcanzó el mínimo histórico en el seguimiento diario que hace Consulta Mitofsky: 46.1% de los entrevistados lo aprueba, 53.5% lo reprueba. En abril del año pasado ese número era de 68%.
El jueves se registró el mayor número de contagios por Covid en un solo día: 5,662 casos confirmados.
El viernes la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, revirtió la decisión de abrir la capital del país y la pospuso, al menos, una semana.
El sábado se rebasó la cifra de 20 mil personas muertas por coronavirus (al inicio de la pandemia, el subsecretario Hugo López-Gatell pronosticó que serían un total de 5,300).
El domingo México fue el país del mundo que más muertes sumó a su registro de coronavirus ese día: 1,044.
El lunes el presidente López Obrador sólo dedicó unos segunditos de su larga conferencia matutina al tema de la pandemia, apenas para decir que ya vamos saliendo.
El sábado, el presidente visitó un hospital del ISSSTE en Morelos; tras verse descubierto, el gobierno aceptó en un comunicado que disfrazó a empleados de enfermeros y pacientes con Coronavirus para la foto oficial; fue un simulacro, se justificó la institución. Ese día López Obrador había declarado que en la 4T “ya no hay cabida para simuladores”.
SACIAMORBOS
En caso de que no lo haya notado, esta columna de opinión no contiene ninguna opinión.
Por Carlos Loret de Mola en El Universal
historiasreportero@gmail.com