¿Recuerdan la película Lluvia de Hamburguesas? En esa
película, un científico amateur logra crear una máquina que convierte las
partículas de agua en comida, lo que le permite darle a los habitantes de su
triste y gris pueblo un banquete con todo lo que se les antoje. Su máquina de
hacer comida es lanzada a las nubes y es controlada por una computadora desde
la que le indican lo que va a preparar para todos.
La parte más divertida es que la comida llueve del cielo y,
en una ocasión, incluso deja al lugar cubierto por enormes bolas de helado de
distintos sabores, haciendo que todos cancelaran sus planes y se dedicaran a
jugar y comer.
Algo así no va a pasar en el mundo, y tampoco tenemos a un
genio del chocolate como Willy Wonka con una fábrica en la
que todo es comestible, pero un pueblo en Suiza despertó para
descubrir un incidente muy similar.
De acuerdo con los reportes, los habitantes de un pequeño
pueblo despertaron la mañana del 14 de agosto para descubrir que estaba nevando
chocolate, esto sucedió en el pueblo de Olten, que se encuentra
entre Zurich y Basel, después de un accidente en la fábrica de chocolates
Lindt.
El fabricante de chocolate confirmó que tuvieron un problema
pequeño en la ventilación de enfriamiento para una línea de granos de
cacao tostados (granos de cacao triturados que luego se convierten en
chocolate), según Associated Press. El “accidente” sucedió al mismo tiempo que
una onda de fuertes vientos llegó al pueblo y eso hizo que el polvo de
chocolate saliera volando y dejara las zonas cercanas totalmente cubiertas.
Las imágenes del pueblo fueron compartidas en redes sociales
y mostraban que las calles, edificios, casas, árboles y todo a su alrededor
quedaron cubiertos por una pequeña capa de nieve de chocolate (y
considerando que la ciencia recomienda comer chocolate regularmente, podemos
decir que este es un accidente muy saludable), y a muchos de sus habitantes les
encantó la idea.
"¡Finalmente sucedió, muchachos! 2020 se arruinó lo
suficiente como para que finalmente hiciera algo bien", dijo un usuario de
Twitter.
Lindt y Sprüngli le dijeron a Associated Press que el
chocolate era inofensivo para las personas y el medio ambiente, y que se
ofreció a pagar los costos de limpieza, aunque nadie ha aceptado la oferta
todavía (y tampoco se están quejando por la sorpresa que recibieron en medio de
la pandemia).
Mientras tanto, el sistema de ventilación de la fábrica ya
fue reparado y la producción de chocolate ya volvió a la normalidad.
Sorprendentemente, esta no es la primera vez que llueve
comida del cielo. En 2010, cientos de peces cayeron sobre un pequeño pueblo
rural de Australia, un fenómeno que los expertos relacionan con tornados que
absorben agua y arrojan a los peces a kilómetros de distancia, y en 2018, las
calles de una pequeña ciudad alemana se cubrieron de chocolate después de que
un tanque de almacenamiento de una fábrica tuvo una fuga de chocolate con leche
que invadió la ciudad.
¿Creías que 2020 no se podía poner más loco? Piensa de
nuevo, esto todavía no se acaba y quedan unos meses para que cosas más extrañas
sucedan. Con un poco de suerte, serán tan inofensivas y divertidas como
esta lluvia de chocolate (en México seguimos esperando
que algo así pase) que tiene a muchos pensando en mudarse a Suiza.
Esto solo podía pasar el año en el que iniciamos con incendios forestales, perdimos a Kobe y quedamos encerrados en casa por meses debido a la pandemia. Algo bueno tenía que salir de todo esto, y eso fue una lluvia de chocolate.
Kakao-Regen im Oltner Industriequartier: Lüftungsanlage ist schuld daran https://t.co/O9Iorni5Iz pic.twitter.com/3LWZCsHeE0
— Olten (@olten) August 15, 2020