Jessica Fox, piragüista australiana que ganó dos medallas
en Tokio 2020, confesó en su cuenta de Instagram el truco con el
que pudo terminar la prueba de slalom en kayak y quedarse con la medalla de
bronce: un condón como método de reparación para su canoa.
La competidora oceánica no solo requirió de la pericia y
experiencia de tantos años en competencia durante la prueba de kayak, pues
una parte del interior de su canoa se rompió y debió ingeniárselas para
terminar la prueba con un método sorpresivo.
La australiana compartió una imagen en la que ilustra la
reparación que hizo con el preservativo y añadió un mensaje en tono de broma.
“Apuesto a que no sabían que los condones se pueden usar para reparar kayaks.
Muy elástico. Más fuerte”, comentó la competidora de 27 años.
Esa reparación impensable derivó en la medalla de
bronce que ganó en la prueba de slalom, su primera presea olímpica y que
después se colgó el metal dorado en la prueba de piragüismo al superar a la
británica Mallory Franklin y la alemana Andrea Herzog.
Fox ya ha ganado 10 campeonatos mundiales y ahora se ha
llevado la gloria olímpica, con lo que puede presumir de ser la atleta top de
su disciplina alrededor del planeta.