pareció revelar este jueves más detalles sobre su estrategia con respecto a Santiago Nieto, quien fue desplazado de manera fulminante de la UIF luego de la controversia por su boda del pasado sábado.
AMLO dijo durante la conferencia, la primera en la que se explayó sobre el tema desde la noticia de su salida luego de apenas mencionar el tema ayer, que respetaba a Nieto y que era un hombre íntegro, pero enseguida añadió que un servidor público no puede exhibir lujos porque el combate a la corrupción requiere de autoridad moral.
Pero tras ser consultado por un periodista sobre si consideraba incluirlo nuevamente en su gobierno, o enviarlo a una embajada al exterior, la respuesta de AMLO exhibió menos hostilidad con respecto a su ex funcionario.
"Sí, no descartamos esa posibilidad, pero tiene que pasar algún tiempo, y tenemos que escuchar más a la gente sobre esto, que la gente opine. Se actuó de esa forma, porque él mismo presentó su renuncia, entendiendo de que era un escándalo que perjudicaba la imagen del gobierno, la transformación del país, entonces hay opiniones encontradas", dijo el presidente.
Los dichos de AMLO confirman la información publicada por este medio el pasado martes, que indicaba que el tema Nieto no era un tema cerrado dentro de Palacio Nacional y que varias personas cercanas al presidente le recomendaron contenerlo con algun designación futura.
En ese grupo de personas se encuentra el general Audomaro Zapata, jefe del espionaje oficial, quien si bien le dijo AMLO que Nieto no debería regresar a una posición de gabinete porque eso debilitaría el mando presidencial, sí le sugirió retirarlo del país por la vía diplomática, preferentemente un consulado en EU o bien una embajada en Europa.
Zapata advirtió además al presidente que Nieto debe conservar su numeroso sistema de custodia personal porque si el ex funcionario, blanco de numerosas amenazas del crimen organizados, sufriera algún tipo de agresión podría provocar una crisis grave para el oficialismo.
