Desde su llegada a Mérida encantó a las personas, por esta razón se decidió llevarlas a otros destinos de Yucatán, como el Pueblo Mágico de Valladolid; la verdad es que son las favoritas de las personas locales, turistas nacionales e internacionales para tomarse fotos.
Son varios las historias que rodean a la icónica silla yucateca, pero la que más se cuenta es que fue mandada a construir por un padre celoso, quien la pidió con aquella forma para que su hija no estuviera tan cerca de sus pretendientes.
De esta manera la joven podía ver de frente a su enamorado sin que hubiera algún contacto de por medio, así sucedió hasta que su hija se casó y ya no volvió a utilizar la silla; con el pasó de los años su significado cambió y se convirtió en un verdadero símbolo de amor de Yucatán.
Encontrarás a la icónica silla yucateca en lugares concurridos, como los parques, en Mérida se encuentran mayormente en Paseo Montejo, por esta razón se ha quedado grabada como uno de sus símbolos característicos.
La famosa silla de los confidentes es una extravagancia del diseño que difícilmente puede encontrarse en otros lugares.
Siempre llama la atención su peculiar forma pues los bancos individuales se encuentran, uno frente al otro, conectados por un recarga brazos compartido, que los vuelve parte de una sola banca.
Esta atípica distribución permite que los interlocutores puedan hablar sin perderse la mirada y, al mismo tiempo, estar separados físicamente por una barrera de concreto.
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