Estudiantes de la Escuela Nacional de Ingeniería Pesquera de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN) señalaron a la Fiscalía General del Estado (FGE) por forzarles a emitir y firmar declaraciones, mediante intimidación con armas durante el cateo a esa unidad académica en San Blas, el 25 de febrero pasado.
El subfiscal de Nayarit, Rodrigo Benítez, en conferencia de prensa anunció ese día que iniciarían investigaciones y aseguramientos debido a la probable venta de drogas y otros delitos al interior de la escuela.
“(Se lleva a cabo) una investigación por la probable venta de drogas al interior de la escuela, la comercialización, incluso con insumos de la propia escuela de especies no permitidas; la corrupción de menores de edad y lo que pudieran ser algunos ilícitos de acoso en contra de alumnos y alumnas”.
Por temor a represalias, una de las vocera de estudiantes pidió el anonimato para emitir sus declaraciones respecto a lo que pasó ese día cuando fue asegurado el inmueble, incluso con un helicóptero sobrevolando la zona.
La joven señaló que policías sin identificarse arribaron a los dormitorios y llevaron a todas las personas hacia el comedor, a ella en particular le preguntaron si tenía intercambio de calificaciones por sexo con sus profesores.
“A mí me tocó ser escoltada al dormitorio para sacar mi credencial y para poder tomar ellos, y las preguntas fueron de ‘¿Te vas con los maestros?, ¿Tienes sexo con los maestros por calificaciones?, ¿Tienes tatuajes?’, ‘No, no tengo’, les dije; ¿Segura, a ver?”.
Dijo que les impidieron grabar y comunicarse al exterior con otras personas, y que le hicieron firmar una declaración respecto si sabía sobre el manejo de una especie acuática en particular.
“Un oficial me realizó una pregunta acerca de una especie que manejaba un maestro y yo le contesté, fue por una hoja y me hizo firmar y yo no quería firmar, pero no podía, tenía miedo porque estaba rodeada de hombres con armas y para mí eso era impactante; fueron horas donde a nosotros se nos privó de la comunicación, del alimento, si nos veían con el teléfono nos gritaban”.
Piden una explicación sobre lo ocurrido porque los policías les exigieron que presentaran a unas niñas, en referencia al presunto delito de trata de personas que previó el subfiscal.
“Aquí se llegó diciendo: estamos buscando a las niñas, dónde están las niñas, dónde las tienen escondidas y pues somos estudiantes, y decían que nosotros teníamos a niñas escondidas, que mentíamos, que tratábamos con ellas. En esta escuela, cabe recalcar que nadie es menor de edad, todos somos adultos”.
Estas personas señalaron como responsables, de llegarles a ocurrir algo, al gobernador del estado, Miguel Ángel Navarro Quintero y quienes resulten involucrados.
“Somos estudiantes enojados, somos estudiantes con miedo y queremos responsabilidad de cualquier cosa que nos pase al ciudadano Miguel Ángel Navarro Quintero, a la diputada Mirna Encinas y a todos los involucrados”.
La vocera señaló a la diputada Encinas como responsable de acusar a estudiantes de estas situaciones ante las autoridades.
Sobre el panorama, la rectora Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), Norma Galván, dijo que habrá respeto a los procesos de investigación, negó que la autonomía universitaria fuera violentada porque hubo una orden de cateo emitida por un juez de control, y dijo que darán acompañamiento emocional a estudiantes, además de que se mantendrán las actividades académicas de manera normal.
“Me comentaban los estudiantes quienes pasaron esta situación, que sí sintieron diversas emociones el día del cateo, ciertamente, como algunos ya lo han estado manifestando; he estado platicando con ellos, insisto, y acordamos de llevar un acompañamiento para que desde la parte emocional, para que nos digan si en algún momento ellos sintieron alguna otra situación que deba ser considerada por la institución e incluso, también, comentada con quién se tenga que comentar, también dejamos abierto esa posibilidad”.
La rectora dijo que se tuvieron que reforzar chapas de puertas y se rehabilitó el internet porque encontraron cables que quedaron sueltos, pero afirmó que se dieron las garantías para que continúen las actividades académicas.
Por Karina Cancino / Aristegui
