En un evento que podría compararse con la firma de un contrato millonario, un niño ha dado un paso importante hacia la responsabilidad al recibir su primer celular. Las imágenes de este momento se volvieron virales en redes sociales, dejando a muchos padres sorprendidos y otros tomando notas para futuras negociaciones con sus propios hijos.
En las divertidas imágenes compartidas, el niño aparece firmando un contrato que establece las reglas y responsabilidades asociadas con la posesión de su nuevo dispositivo. Algunas de las cláusulas más notables incluyen:
Propiedad, pero con reservas: "Es tu teléfono, pero yo lo compré y puedo quitártelo si lo veo necesario". Un recordatorio de que, a pesar de ser suyo, los padres tienen la última palabra.
La triple contraseña: "Siempre mamá, papá y yo debemos saber tu contraseña". Privacidad con supervisión parental, una combinación que equilibra libertad con responsabilidad.
Horarios sagrados: "No lo usarás en horarios de clase ni en espacios de convivencia familiar". Estableciendo límites para asegurar tiempo de calidad en eventos familiares y durante el aprendizaje.
Cuenta de ahorros para el celular: "Si se golpea o se daña, es tu responsabilidad costear los gastos". Una lección de responsabilidad financiera desde temprana edad.
Modificación de horarios: "Los horarios de uso y cargas serán modificados". Adaptabilidad para ajustarse a las necesidades familiares y escolares.
