El tiempo no le alcanzó al presidente Andrés Manuel López Obrador para terminar todos los hospitales que prometió en su sexenio y, como ha ocurrido en otras administraciones, heredará a su sucesora, Claudia Sheinbaum, la tarea de finalizar estas obras. Son 35 proyectos de infraestructura: 23 hospitales y 12 clínicas o unidades médicas. Aunque durante su gobierno criticó a sus antecesores que dejaron hospitales inconclusos, a López Obrador le ocurrió lo mismo. Los trabajos de construcción a marchas forzadas, algunos por parte del Ejército, no pudieron contra el reloj.
La cantidad de obras hospitalarias que dejará es 11 veces menor que la de sus homólogos. Los gobiernos de Enrique Peña Nieto (2012-2018) y Felipe Calderón (2006-2012) dejaron abandonados, en conjunto, 394 establecimientos de salud, según un censo elaborado por autoridades sanitarias de la administración actual. López Obrador prometió recuperar esos hospitales, rehabilitar los estatales y, además, construir 16 nuevos, de los que deja 14 a medias. Hay avances en las obras, pero no alcanzan para inaugurarse antes del 30 de septiembre, cuando entregará la Presidencia. Él mismo lo reconoció en una conferencia de prensa reciente, aunque sostuvo que están garantizados los recursos para concluir los hospitales. “Estoy hablando de esto porque van a quedar obras que la presidenta va a concluir. Ya están también todos los presupuestos para que se terminen las obras”, declaró el 13 de septiembre.
Los hospitales que deja Entre los proyectos de infraestructura que deja López Obrador se encuentran cinco hospitales construidos por el Ejército. Dos de ellos se financian con dinero de la venta del avión presidencial. Uno es el Hospital General de Tlapa de Comonfort, en Guerrero. El proyecto inició en agosto de 2023 con una inversión de 2,475 millones de pesos. Actualmente registra un avance físico de 52%. “No me va a alcanzar, pero ya está muy avanzado”, mencionó el presidente. Otro es el Hospital General de Tuxtepec, Oaxaca, que arrancó en la misma fecha y con monto similar, pero su avance físico es de 45%.
La próxima presidenta deberá inaugurar, además, el Hospital de San Alejandro, en Puebla, y el Hospital General Regional No. 25 “Zaragoza”, en la Ciudad de México. Ambos pertenecen al IMSS Ordinario, resultaron dañados tras los sismos de septiembre de 2017 y, siete años después, su rehabilitación continúa. En la sustitución del hospital de Puebla se invierten 3,818 millones de pesos y reporta un avance de obra de 45%, mientras que el hospital capitalino arrancó en diciembre de 2022 con una inversión de 2,728 millones de pesos. Ahora registra un avance de 30%. El quinto es el Hospital General “Dr. Agustín O'Horán” de Mérida, Yucatán, a cargo de IMSS Bienestar. En esta obra se invierten 4,804 millones y, de mayo de 2023 a la fecha, lleva un avance de 41%. López Obrador estima que estos cinco hospitales comiencen a operar en diciembre de 2024. “Todos estos, son cinco hospitales, el de Puebla, el de Zaragoza, que es del régimen ordinario; de IMSS-Bienestar, el O’Horán’; el de Tuxtepec y el de Tlapa, esos cinco están a cargo de los ingenieros militares y ya está el compromiso de que van a quedar prácticamente terminados, en obra civil, a finales de este mes. Pero la instalación y la operación va a llevar dos meses más, los van a estar inaugurando en diciembre”, afirmó.
Los gobiernos dejaron de invertir en salud, se invertía poquitito. Hubo una corrupción galopante. Y en los últimos años no hemos visto que esta tendencia se revierta”, Hospitales del IMSS y del ISSSTE Del IMSS Ordinario quedarán pendientes otros cinco hospitales: los generales de Ticúl, Yucatán; Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, y Navojoa, Sonora. Además de los regionales de Ciudad Juárez, Chihuahua –que esperan inaugurar el próximo 15 de diciembre–, y el de Ensenada, Baja California. Por su parte, el ISSSTE planeaba construir seis hospitales en un año, tres meses. Cinco de ellos, prometió su exdirector general Pedro Zenteno, estarían listos en el primer semestre de 2024. “Estamos invitados a hacer historia, al erigir unidades médicas de estas dimensiones en 480 días, lo que deja ver la visión y el compromiso del presidente Andrés Manuel López Obrador con la salud”, declaró en agosto de 2023. Sin embargo, solo se han entregado dos. Del ISSSTE quedarán pendientes el Hospital General de Tampico, Tamaulipas; los regionales de Jalisco; Torreón, Coahuila, y Acapulco, Guerrero. Éste último inició en agosto de 2023, dos meses antes del impacto del huracán Otis. Estaba planeado construirse en un año, con una inversión de 3,200 millones de pesos, pero la obra continúa actualmente, con 56% de avance. Para el doctor Gilberto Castañeda, investigador del Departamento de Farmacología del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav) del IPN, el gasto en infraestructura sanitaria es fundamental para mantener en buen estado los hospitales y clínicas . Sin embargo, explica, México había invertido muy poco en este rubro en la última década. Y aunque reconoce el esfuerzo del gobierno actual por rescatar la infraestructura médica, considera que falta más para cubrir las brechas.
Además del presupuesto destinado a esta área, considera importante mejorar los procesos de planeación, a fin de que los gobiernos no perpetúen las herencias de hospitales sin terminar. “Lo que hace falta es concretar”, subraya.
Otras obras hospitalarias Zoé Robledo, director general del IMSS, presentó este martes un informe de los hospitales que iniciarán operación en los próximos meses. Se trata de 22 proyectos, incluyendo el hospital de Ciudad Juárez mencionado antes. A pesar de intentar avanzar lo más posible, incluso, ayer inauguraron nueve obras de manera simultánea en el mismo número de entidades federativas, estas obras serán inauguradas por Sheinbaum y no por López Obrador. Quedan pendientes los hospitales generales de Santa Rosalía Mulegé, en Baja California Sur, que abriría puertas el 25 de octubre; el de Tijuana Zona Este, en Baja California, y el de Atenco, en el Estado de México, que se entregarán en noviembre y diciembre, respectivamente, de acuerdo con los cálculos de Robledo. Otro proyectos que se heredan a Claudia Sheinbaum son: Hospitales recuperados y APP El director del IMSS agregó que durante el sexenio se recuperaron 58 hospitales que habían quedado abandonados en sexenios anteriores. En su rehabilitación se invirtieron 28,897 millones de pesos. “Se dice fácil, pero el presidente López Obrador ha hecho una gran hazaña y él lo ha dicho: ‘Lo difícil, lo logramos; lo imposible, lo intentamos’”, aseguró el director del IMSS. Esta es una buena decisión. O sea, ya se invirtió dinero, ya se hicieron los estudios de por qué esos hospitales están en esos sitios”,
Estos hospitales estaban incluidos en aquel censo de 394 establecimientos de salud abandonados, es decir, clínicas, centros de salud y unidades médicas. De esa cifra, el extinto Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) recuperó adicionalmente, hasta octubre de 2021, 153 unidades de salud y 110 centros de salud. Mientras que 20 hospitales salieron del censo porque su infraestructura estaba tan dañada que no podría rehabilitarse. En total, en el Programa de Rehabilitación de Hospitales y Centros de Salud, se invirtieron, entre 2019 y 2024, 11,761 millones de pesos. De estos, 4,267 millones se destinaron a 117 hospitales que se rehabilitaron, sobre todo en áreas de farmacia y quirófanos, más 7,493 millones para 2,942 centros de salud. La rehabilitación, explicó Zoé Robledo, incluyó reapertura de consultorios, quirófanos, farmacias, mejora de aires acondicionados e instalaciones eléctricas. Para tener más unidades del Estado, López Obrador inició la compra de los hospitales construidos en otros sexenios bajo el esquema de Asociación Pública Privada (APP). El Gobierno federal busca adquirir entre nueve y 10 de esos hospitales, por los que cada año pagaba cifras millonarias a las empresas que los levantaron, con contratos de más de 20 años, que el presidente consideró leoninos, y que operaban a medias. Actualmente se han concretado los convenios para comprar dos hospitales APP del ISSSTE, pero la negociación del resto quedará en manos del gobierno de Sheinbaum. A decir del doctor Gilberto Castañeda, la estrategia de recuperar hospitales es una buena opción para no malgastar recursos. Sin embargo, menciona, también queda pendiente el reto de equipar todas las unidades y contar con el personal de salud acorde a la demanda.