Al menos cuatro migrantes murieron en el este del Mar Egeo el lunes cuando el pequeño bote en que viajaban desde la cercana Turquía se hundió frente a la isla de Samos, informaron las autoridades griegas.
La Guardia Costera de Grecia indicó que otras cinco personas fueron rescatadas después del naufragio, pero de momento se desconoce cuántas personas viajaban en el bote y si faltaba alguna más.
Los cadáveres de cuatro mujeres fueron encontrados durante una operación de búsqueda y rescate en que participaron tres lanchas patrulleras de la Guardia Costera, una embarcación privada y un helicóptero de la Fuerza Aérea. Las tripulaciones también buscaron en tierra en caso de que los supervivientes hubieran logrado llegar a la orilla.
La Guardia Costera señaló que posteriormente localizaron a varios migrantes en Samos, pero por ahora no queda claro si eran sobrevivientes del naufragio o habían llegado por separado.
Las autoridades aún no cuentan con detalles sobre el naufragio y no cuenta con información sobre las identidades o nacionalidades de los sobrevivientes y los muertos.
Grecia se encuentra en una de las rutas más transitadas a la Unión Europea para la gente que huye de conflictos y pobreza en Oriente Medio, África y Asia. Pese a las medidas de las autoridades griegas en la frontera con Turquía, miles de personas logran cruzar, a menudo navegando desde la costa turca para llegar a las islas griegas en inestables botes inflables.
En los últimos meses, los traficantes de personas también han recurrido cada vez más al traslado de migrantes en potentes lanchas rápidas.
Al menos 30 cadáveres en descomposición fueron hallados en una embarcación a la deriva a unos 70 kilómetros de la costa de Dakar, capital de Senegal, informó el lunes el Ejército.
La Armada fue informada de la presencia de la embarcación el domingo por la noche y una patrullera fue desplegada inmediatamente en la zona, según el comunicado.
"Hasta el momento se han contabilizado treinta cadáveres", dijo el ejército, añadiendo que las investigaciones proporcionarían información más precisa sobre el número de muertos y el origen de la embarcación.
El avanzado estado de descomposición de los cadáveres dificultó el proceso de identificación, añadió.
La ruta migratoria atlántica desde la costa de África Occidental hasta las islas Canarias, que suelen utilizar los migrantes africanos que intentan llegar a España, es una de las más mortíferas del mundo.
En los cinco primeros meses de 2024 murieron en el mar casi 5 mil migrantes en su intento de llegar al archipiélago español, una cifra sin precedentes, según denunció en junio la organización de defensa de los derechos de los migrantes Caminando Fronteras.