Cuando la gente critica en general el servicio de transporte urbano de Mérida “cala el corazón” de los empresarios, porque hay acciones que no son valoradas en su justa dimensión.
“Siempre estamos atentos a que los usuarios reciban un buen servicio, llegamos a los lugares donde ni siquiera hay agua potable y electricidad, y arriesgamos nuestro patrimonio cuando hay huracanes”, señala Russell Arcila Sosa, director general del corporativo Sistema Integral de Rutas Urbanas del Sureste (Sirus) y consejero de la Unión de Camioneros de Yucatán.
“Crecemos junto con la sociedad y siempre estamos listos para atenderla”, recalca el empresario. “Lo han visto en los ciclones. Basta una llamada de la autoridad y los transportistas acudimos a salvaguardar la integridad de la gente”.
Arcila Sosa dice que en esos eventos climatológicos de alto riesgo los operadores exponen su vida por la lluvia, vientos y destrucción, pero la solidaridad con los yucatecos los impulsa para brindar ayuda.
“Lo bonito de esta tarea en el sector camionero es que no se obliga a los choferes. Cuando hay emergencia por huracanes y pedimos voluntarios, se ofrecen a ayudar”, señala. “Los choferes pasan penalidades en los viajes, dejan a sus familias, pasan días entre la tormenta, casi no comen y ayudan a la gente a salir de sus comunidades”.
Otra muestra de solidaridad con la sociedad, recuerda Manuel Ávila Monforte, apoderado de Rápidos de Mérida, la dieron en sus inicios la Alianza y la Unión de Camioneros, que tenían centros médicos, panaderías y ranchos para atender a sus empleados y dotar de leche a las escuelas que patrocinaba la Alianza de Camioneros de Yucatán.
“El transporte ha evolucionado en cobertura y calidad”, afirma Ávila Monforte. “Hace 20 años que Mérida tiene autobuses con aire acondicionado, tenemos unidades de la mejor marca del mercado como la Mercedes Benz y operadores que cada vez reciben mayor capacitación”.
En opinión de Raymundo Vargas León, consejero de la Unión de Camioneros, el transporte público entiende las necesidades de los usuarios y evoluciona junto con ellos. Ahora los usuarios quieren llegar a su destino en forma rápida y buscan alternativas para cumplir, quieren viajar con comodidad y la mayoría de los autobuses están en buenas condiciones y un gran número de unidades cuentan con aire acondicionado”.
Russel Arcila tercia en la plática y recalca: “El transporte juega un papel muy importante en la ciudad, es su aliado y compañero. Los ciudadanos están más seguros en un autobús y desde muy temprano empieza a prestar el servicio”.
Raymundo Vargas retoma la palabra y señala: “Leí una frase que me llamó la atención y dice: ‘Una sociedad y una ciudad no se consideran desarrolladas porque toda la gente pueda comprar un vehículo, sino porque toda la gente use un autobús’”.
“Me imagino a una Mérida sin tantos vehículos particulares, un mejoramiento del medio ambiente por la baja contaminación, con calles accesibles para la circulación y un reconocimiento social al transporte público. Se vale soñar”, comenta.
El tesorero de la Alianza de Camioneros, Alfonso Ramírez Ojeda, recalca que el servicio urbano es importante en la vida de los meridanos y yucatecos porque prestan atención de las 4 de la madrugada a las 12 de la noche. Tienen frecuencias promedio de viajes de tres a 10 minutos de camión en camión, dependiendo de las rutas, y cubren 220 rutas urbanas y suburbanas y siete circuitos, lo que permite la interconexión a todos los puntos de interés de la sociedad yucateca.- Joaquín Chan Caamal
Empresarios | Visión
A juicio de los empresarios, el transporte público contribuye a la eficiencia de la ciudad.
Cobertura
Russell Arcila considera que el transporte público contribuye al funcionamiento de la ciudad porque la cubre toda. Tienen rutas urbanas en las colonias, suburbanas, que incluyen comisarías y periféricas, y semiperiféricas. Además, con un solo boleto o un transbordo los usuarios llegan a su destino.
Sistema radial
Los empresarios dicen que el diseño de un sistema radial en el transporte permite que todo el mundo llegue en corto tiempo a su lugar de trabajo, escuela, hogar y hospitales. Esta movilidad permite rentabilidad y desarrollo económico a Mérida.