En México falta mucho por hacer en temas de inclusión financiera. En 2015, sólo 33.6 millones de adultos contaban con una cuenta de banco.
Por otro lado, el hábito del ahorro no está muy arraigado. El 59% de los mexicanos que perciben un salario entre 2 mil 500 a 12 mil pesos, no suelen ahorrar.
Ante esta situación de la poca inclusión financiera, los mexicanos han buscado un método de ahorro informal.
Uno de cada cuatro adultos emplea el mecanismo de las tandas, método en el que sienten una mayor confianza y seguridad, de acuerdo a resultados de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2017.
Desde ese punto las tandas forman parte de la educación y cultura financiera de los mexicanos, dadas sus bondades, aunado a que durante esta temporada de la cuesta de enero suele ser una gran herramienta para salir de un apuro.
Jorge Oseguera, director general de GIRO, menciona que una tanda es “un sistema que se basa en la confianza y en el apoyo comunitario. La tanda funciona como un método de administración financiera. Los primeros números obtienen un crédito a una tasa de interés cero y para el último número sirve como un método de asegurar el ahorro”, dijo.
Si bien este es el concepto de una tanda, es necesario conocer cuáles son sus ventajas y desventajas.
1.- Sin historial. Para iniciar o formar parte de una tanda no es necesario tu buró de crédito ni tu historial con cualquier banco o institución financiera o realizar trámites engorrosos, básicamente todo este sistema se basa en la confianza entre las personas que participan en la tanda, quienes aceptan el compromiso de depositar cada pago en el plazo correspondiente.
2.- Sólo el monto acordado. Dentro de las tandas no existen cobros extra, es decir, comisiones, intereses, pagos de mantenimiento o de origen, el único pago que debe realizarse en tiempo y forma es el monto acordado de la tanda, que pueden ser 500 pesos quincenales, por lo que al mes se destinará a este mecanismo mil pesos.
3.- Ahorro. Por supuesto, este es uno de los principales motivos de las tandas, fomentar el ahorro. Jorge Oseguera explica el hecho de que tantos mexicanos lo usen es evidencia de que en una sociedad como la nuestra que no está acostumbrada a la buena administración financiera que el ahorro de hecho comienza de esta forma.
4.- Cooperación en comunidad. Este tipo de prácticas fomenta también la ayuda comunitaria, es decir, si alguien dentro de una comunidad necesita apoyo económico, las personas se pueden acercar a él y ofrecerle realizar una tanda, además por ser un proyecto entre conocidos existe un compromiso más fuerte de no fallarle a quien te apoya.
5.- En aprietos. Una tanda también funciona como un método que saca de apuros a millones de mexicanos día con día, ya que les brinda una solución rápida y sin trámites en situaciones en las que necesitan dinero de emergencia. Por lo que a pesar de que muchos destacan los riesgos, en este sistema no todo es malo por este tipo de ayuda.
Sin importar cuál sea tu objetivo, la tanda puede ser una opción para obtener dinero o ahorrar a corto plazo, sólo recuerda que para crearla debes tomar en cuenta quién formará parte, fijar saldos y fechas de pagos para que este modelo cumpla con su finalidad financiera y apoye a toda una comunidad.