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Una mujer ha revelado que fue declarada muerta durante tres minutos tras sufrir un golpe de calor, y afirma que los relojes "dejan de funcionar" siempre que los lleva puestos.
Cuando Jade visitó a una amiga para pasar una relajante tarde de verano, no esperaba que su vida pendiera de un hilo horas más tarde.
Recuerda que el calor en Green Bay (Wisconsin, EE.UU.) alcanzaba los 32 grados y que, con la elevada humedad, la temperatura era "insoportable".
Pronto empezó a experimentar frecuentes ataques de náuseas, mareos, sequedad de boca y agotamiento que la llevaron a desplomarse en el sofá del salón.
Cuando Jade, de 36 años, fue trasladada de urgencia al hospital, los médicos la declararon muerta durante tres minutos y dijeron que el culpable era un golpe de calor.
Ahora, en un intento de concienciar a la gente, ha compartido su historia en TikTok, acumulando 191.000 visitas y más de 20.000 "me gusta", y afirma que la experiencia le ha hecho "perder el miedo" a la muerte.
"Había experimentado un miedo extremo a morir antes de este incidente, pero cuando realmente sucedió, tenía cero miedo", dijo la creadora de contenido, de Wisconsin, a NeedToKnow.co.uk.
"Recuerdo sentirme mal constantemente y realmente asquerosa. Estaba agotada, letárgica y enferma del estómago, con la boca seca.
"Salí a fumar y, en cuanto terminé y me levanté, supe que tenía problemas. Mi prioridad inmediata fue volver a entrar y no creo que en ese momento comprendiera que me estaba muriendo, pero sí que me estaba hundiendo".
Jade recuerda que entró tropezando en el apartamento y se desplomó en el sofá, antes de emitir un sonido gorgoteante.
Dice: "Todo debió de ocurrir en cuestión de instantes, pero me pareció mucho más tiempo y esta profunda sensación de enfermedad absoluta me golpeó como una tonelada de ladrillos.
"Sentía que la cabeza se me hinchaba y que todo el cuerpo se me encogía. Nunca había sentido nada parecido. Me sentí completamente bien con la muerte porque quería dormir para siempre.
"Entonces todo se volvió negro y supe que estaba a punto de morir".
Jade fue trasladada en ambulancia al hospital St Vincent, donde la reanimaron con un desfibrilador.
A medida que llegaba, iba perdiendo el conocimiento, pero le hicieron pruebas de imagen de la cabeza, análisis de sangre y electrocardiogramas, una prueba para comprobar el ritmo cardiaco.
Durante los cuatro días siguientes, le pusieron inyecciones para prevenir la formación de coágulos y, al poco tiempo, los médicos le comunicaron que la habían declarado "muerta" durante tres minutos a su llegada por un golpe de calor.
En el vídeo habla de su historia y de los sucesos "extraños" que le han ocurrido desde entonces.
Los usuarios acudieron en masa a los comentarios para compartir sus reacciones, y muchos detallaron sus propias experiencias.
"Me desmayé DOS veces ese verano", dijo una persona.
Otra comentó: "Ese verano estaba embarazada. El calor era HORRIBLE".
"Tu historia es muy interesante. Me alegro de que estés a salvo", añadió otra persona.
Lauren dijo: "¿Daba miedo? ¿Qué viste? Me da mucho pánico pensar en la muerte".
"La idea de morir me asusta tanto que no podría ni sentarme a escuchar esto", comentó un usuario.
"El 3 de junio de 2022 morí. Mi marido hizo reanimación cardiopulmonar durante 37 minutos hasta que los servicios de emergencias se hicieron cargo", añadió Kate.
Jade nació con síndrome de Wolff-Parkinson-White y síndrome de taquicardia postural, que ambos causan anormalidades con aumento del ritmo cardíaco.
A menudo, siente que va a "vomitar" el corazón y, en ocasiones, temblores extremos, así como desmayos.
Debido a esto, ella encuentra que el calor intenso desencadena estos episodios y aunque su experiencia cercana a la muerte en julio de 2011 no ha empeorado estos, ella cree que fueron un factor contribuyente.
Jade dijo: "Mis síntomas siguen siendo leves, pero he estado teniendo otros nuevos, como fiebre baja y debilidad muscular. No estoy segura de que estén relacionados con el golpe de calor.
"Todavía estoy esperando un diagnóstico definitivo, ya que esto sólo ha ocurrido después de mi incidente, pero siempre lucharé por mí misma y por mi vida".
Desde entonces, Jade también ha sufrido frecuentes convulsiones, que nunca había tenido antes del incidente.
Dijo: "Al principio, pensé que era otra insolación, pero me desmayé y los médicos creen que es porque todavía estoy muy agotada por toda la ansiedad de haber estado a punto de morir.
"Pero me han ingresado varias veces por este motivo y me han hecho pruebas como resonancias magnéticas y más análisis de sangre, además de ver a un neurólogo y me han diagnosticado epilepsia.
"Ahora ya no las tengo tanto, pero he estado en contacto con otros supervivientes de experiencias cercanas a la muerte que me han dicho que tuvieron convulsiones durante un tiempo después, pero que de repente dejaron de tenerlas".
Jade también ha experimentado otras "extrañas anomalías", como no poder llevar relojes normales, ya que dejaban de funcionar en cuanto se los ponía.
Y añadió: "No era algo que me pasara antes y los únicos relojes que son seguros son los relojes inteligentes caros".
He renunciado a ellos por completo, pero los vapes también se apagan incluso con la batería llena".
"También me han pasado muchas cosas espeluznantes, como oír voces y ver cosas que no existen. A veces han sido susurros o figuras oscuras y nebulosas, y empecé a grabar mi casa porque tenía miedo de perderla.
"Creo que esto me dice que la vida continúa después de la muerte.
"Siento que estoy en un club especial y esto me ha hecho aprender a cuidarme mejor y a valorar más la vida.
"No vivo con miedo a la muerte y sé que cuando llegue mi hora, cualquier temor se desvanecerá como antes.
"La mayor lección que he aprendido es que es absolutamente cierto lo que dicen: el miedo en sí siempre es peor que lo que realmente tememos".
