—El problema se le podría salir de las manos —recalcó—. En temporada de lluvias hay que actuar rápido, se deben aumentar las cuadrillas de trabajo y la compra de la materia prima.
En una entrevista, dijo que Mérida tiene poco más de 2,400 kilómetros de calles pavimentadas, de las que el 20% ya rebasó su período de vida útil. En este caso el control se hace mediante reconstrucción de las mismas cuando están en zonas poco transitadas o se repavimentan si son vías importantes donde no se puede interrumpir la circulación mucho tiempo.
En el resto de las calles se recurre al bacheo, ya sea tapando los hoyos o colocando paños que abarcan superficies mayores.
—Esas estrategias se aplicaban en el trienio anterior para tener el problema bajo control —explicó—. En temporada de lluvias teníamos 12, 13 y hasta 15 cuadrillas de bacheo contra las ocho o diez convencionales.— H.V.A.
—Durante la emergencia habilitábamos a gente del área de construcción para que apoyara a los bacheadores. También duplicábamos la compra de concreto asfáltico, la cual pasaba de 1,200 ó 2,000 metros cúbicos a 4,000 e incluso 5,000 m3.
El ingeniero Elgar Pech Canul consideró que el problema del nuevo gobierno municipal está en que no han abierto los sistemas administrativos y financieros para comprar la materia prima, la cual se surte día con día porque debe utilizarse caliente. Una vez fría ya no sirve para esa labor.
Hay cuatro empresas que producen concreto asfáltico caliente: Asfaltera del Sureste, Terrasu, Mool y Asfaltos y Emulsiones Peninsulares. En el Ayuntamiento es necesario una larga licitación pública cuando las compras de material rebasan el medio millón de pesos.
—En este caso lo que cabe es comprar pequeñas cantidades, de $350,000 cada una. De esta forma sólo se requiere invitar a tres empresas para que hagan sus propuestas de precios y después elegir una de ellas.
Elgar Pech dijo que los baches son inevitales, sobre todo en temporada de lluvias, pero pueden ser controlados. Y el Ayuntamiento tiene todo para hacerlo: equipos y maquinaria en buen estado, trabajadores capacitados e incluso subdirectores que conocen todo el proceso de trabajo.
El ingeniero Elgar Pech Canul, ex director de Obras Públicas del Ayuntamiento, consideró que los apuros del nuevo gobierno municipal en el caso de los baches se deben a que “no han abierto los sistemas administrativos y financieros” para comprar la materia prima, la cual se surte día con día porque debe utilizarse caliente.
Agregó que hay cuatro empresas que producen concreto asfáltico caliente: Asfaltera del Sureste, Terrasu, Mool y Asfaltos y Emulsiones Peninsulares. En el Ayuntamiento, puntualizó, sólo es necesaria una larga licitación pública cuando las compras de material rebasan el medio millón de pesos.
—En este caso lo que cabe es comprar pequeñas cantidades, de $350,000 cada una. De esta forma sólo se requiere invitar a tres empresas para que hagan sus propuestas de precios y después elegir una de ellas.
Elgar Pech dijo que los baches son inevitales, sobre todo en temporada de lluvias, pero pueden ser controlados.
—El Ayuntamiento tiene todo para hacerlo: equipos y maquinaria en buen estado, trabajadores capacitados e incluso subdirectores que conocen todo el proceso de trabajo.