Hace unos años las grandes granjas porcícolas locales corrían el riesgo de cerrar por la contaminación que causaban, las altas multas de instancias ambientalistas y los gastos infructuosos para solucionar el problema.
Ahora, con el apoyo del gobierno federal, esos empresarios dieron un giro a su situación. Ya no contaminan, pues procesan las excretas animales para convertirlas en gas metano, y con éste generan electricidad para sus granjas y sistemas de riego, lo cual reduce hasta en 80% lo que pagan a la CFE por energía.
Además, obtendrán recursos económicos provenientes de los "bonos de carbono", que se pagan por la reducción de contaminantes atmosféricos.
Todos esos avances se difundirán en la Cumbre Mundial del Cambio Climático que se realizará próximamente.
-Al cerrar este año Yucatán tendrá 47 biodigestores (generadores de gas metano) en igual número de granjas -dijo Roger González Herrera, gerente local del Fideicomiso de Riesgo Compartido (Firco), instancia que financió parte de esos proyectos.
-En ellas están funcionando dos generadores de electricidad movidos por ese combustible, pero a fin de año entrarán en operación otros 30 más -agregó.
Antes de la intervención del Firco en la solución del problema grupos de empresarios instalaron tres biodigestores.
Además, la empresa porcícola Kekén construyó otros 12, de modo que el total de plantas generadoras de gas metano en Yucatán será de 62.
Con ello se reducirá cerca del 80% del problema de contaminación que causaban las grandes granjas porcícolas.
Con esos equipos se suprime incluso la pestilencia que producían las lagunas de desechos animales.
El funcionario recorrió Kanasin y Acanceh para observar esas granjas con sus equipos. Lo acompañaron Francisco Villa Jiménez, coordinador de agronegocios, y Wilbert Páez Silva, Responsable de Energía Renovable del Firco.
Una de las granjas visitadas es "La Pilarcita", que dirige David Alvarado Sosa y en la cual los socios y el Firco invirtieron casi $4.2 millones en la construcción del sistema de tratamiento de las excretas porcinas, el biodigestor que concentra el gas metano, el motogenerador de electricidad y un sistema de riego.
El lugar tiene 8,500 cerdos en crecimiento, cuyas excretas generan 1,500 metros cúbicos de gas metano al día. Con ello se pueden producir 120 kilowatts/hora de electricidad, de los que el 50% son suficientes para abastecer a todas las instalaciones del lugar. El resto puede venderse a la CFE. (Continuará).
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