Al dar su versión sobre el retraso en la construcción del hospital general de Valladolid, el secretario estatal de Salud, Álvaro Quijano Vivas, afirma que el gobierno de Patricio Patrón Laviada dejó inconclusa la obra y con errores en el diseño, derivado de la falta de planeación.
El funcionario dice que al recibir la obra, en agosto de 2007, el edificio tenía sólo un 44% de avance, según las bitácora de construcción y los documentos de entrega-recepción. Asegura que el gobierno panista únicamente contaba con un permiso sanitario expedido por la Cofepris, pero no acreditó la obra ante el área de Infraestructura Hospitalaria de la SSA.
En rueda de prensa, Quijano Vivas dice que un hospital de 60 camas como el de Valladolid debía tener 5,000 metros cuadrados de construcción, pero el gobierno anterior lo amplió a 10,000 m2, fuera de la norma que indica el Modelo de Recursos para la Planeación de Unidas Médicas del Sector Salud de la SSA.
El funcionario afirma también que, de acuerdo con el proyecto original, la obra tendría un costo de $100 millones, pero debido a la "deficiente planeación de origen y las correcciones que se han tenido que hacer", el hospital terminará costando el doble.
Cuando se le preguntó por qué han tardado cuatro años en corregir y terminar la obra, Quijano Vivas alega que se debe a cuestiones administrativas y financieras, factores que están "fuera de control" de la dependencia a su cargo. Por más que le insistieron varios reporteros, el galeno no entró al terreno de las descalificaciones contra el ex gobernador.
El secretario de Salud estatal, Alvaro Quijano Vivas, afirmó que la falta de planeación en el proyecto del hospital de Valladolid ocasionó que se cometieran errores en el diseño, que fueron detectados en una visita de supervisión que realizó personal de la Secretaría de Salud del gobierno federal en 2009.
El funcionario exhibió un reporte de la Subdirección de Calidad de la Acreditación de la dependencia federal en la que se indica que en la inspección, realizada del 28 al 30 de octubre de 2009, se hallaron "desviaciones" en los planos y en la obra física, en las áreas de: unidad quirúrgica, tococirugía, urgencias, hospitalización y neonatología.
En rueda de prensa, Quijano Vivas admitió que sí había un proyecto y que la Secretaría de Salud autorizó el arranque de la obra en 2005, pero en esa visita, realizada cuatro años después, se observaron los errores y les pidieron corregirlos.
Igual como ocurrió con el ex gobernador Patricio Patrón Laviada, el doctor Quijano Vivas declinó responsabilizar directamente a la Secretaría de Salud federal, por esa aparente falta de coordinación, pues primero se debió validar que todo estuviera en orden antes de dar el permiso para que se iniciara la obra.
Hara Kiri
En reiteradas ocasiones algunos reporteros le preguntaron si la denuncia de Patrón Laviada sólo tienes fines políticos, si está escupiendo para arriba, si se hizo el hara-kiri o si cometió una irresponsabilidad al hacer una obra sin la planeación debida, pero el galeno dijo que quien debe responder esos señalamientos es el ex gobernador.
El funcionario se limitó a dar su versión y lo más que dijo sobre las acusaciones de Patrón Laviada es que quizá se deban a una falta de conocimiento.
Quijano Vivas, incluso, dijo que le parece bien que el ex gobernador haya denunciado el caso -"tiene todo el derecho de hacerlo"-, a fin de que se investiguen los hechos y se deslinden responsabilidades.
Entre otros conceptos, el secretario afirmó, como informamos en primera plana, que la obra se amplió al doble en metros de construcción fuera del Modelo autorizado, no había permisos del área de infraestructura de la SSA, sino sólo el de la Cofepris, que ve permisos sanitarios, y se han tenido que corregir, incluso demoliendo algunas partes, el diseño del hospital de Valladolid.
Quijano afirmó que con los $36.5 millones que dejó el gobierno anterior no alcanzaba para terminar la obra, como afirma el ex gobernador y que, incluso, por la falta de planeación, el proyecto original no decía en cuánto tiempo se terminaría.
El galeno dice que de 2005 a 2009 se autorizaron $185 millones para el hospital. Afirma que hay más de $30 millones para terminar la obra física y una cantidad similar para el equipamiento del nosocomio.
El hospital, dice, tiene un 90% de avance físico y estaría listo a fines de este año.
Sobre el tema, el diputado Mauricio Sahuí Rivero declaró que el gobierno federal ha armado una especie de "juego perverso" en el caso de Valladolid, debido a que destina recursos, pero no aprueba los proyectos y permisos para su terminación.
El coordinador de la bancada priista recalcó que es una incongruencia de las autoridades federales, pues dice: "Ahí está el dinero, pero no te doy los permisos". Consideró que es oportuna la denuncia del ex gobernador Patrón Laviada, a fin de que se aclare este asunto.
"Somos los primeros que creemos que debe de ser esclarecido, efectivamente como pide el ex gobernador, porque resulta que dejan ahí una obra que debiera de ser concluida en un determinado tiempo, pero no nos dice que dicha obra no contaba con los proyectos debidamente realizados y los proyectos debidamente autorizados", indicó el diputado.- Félix Ucán Salazar
El secretario de Salud, Alvaro Quijano, afirma que el hospital de Valladolid se terminaría en diciembre de este año.
"Adaptado"
El galeno asegura que el gobierno de Patricio Patrón adaptó el diseño del Hospital Regional de Alta Especialidad (HRAE) para hacer el proyecto del hospital de Valladolid, "que tiene un diseño arquitectónico muy bonito", pero no se apega a las normas para su acreditación.
"Indispensable"
Quijano dice que la acreditación es indispensable para que el gobierno federal asigne dinero para operar el hospital, cuyo costo anual es de $180 millones, similar a los que finalmente costaría su construcción.
"Torpes"
El diputado Mauricio Sahuí dice que "las torpes autoridades federales" ponen trabas a la obra y señala que el mismo ex gobernador dice que si hay funcionarios federales involucrados en esto se les castigue