Noticias de Yucatán
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Por un disparo en la cabeza su vida está en peligro
La venganza de un delincuente tiene debatiéndose entre la vida y la muerte a Andrés Díaz Kantú, comandante de la Policía de Seyé, a quien anteanoche José Bernabé Kuk Collí, alias “Cheyene”, le disparó en la cabeza.
Luego del ataque, en el municipio de Acanceh, policías estatales montaron una operación especial de vigilancia cerca de ese municipio, que luego de unas horas rindió frutos pues fue detenido el agresor.
Díaz Kantú había detenido en varias ocasiones al “Cheyene”, a quien decomisó productos robados.
Venganza: dispara contra un oficial
Lo agrede porque lo había detenido en varias ocasiones
Un comandante de la Policía Municipal de Seyé sufrió anteanoche un atentado con arma de fuego a manos de un conocido delincuente y ex militar de esa comunidad.
El intento de ejecución tiene al borde de la muerte al comandante en el Centro Médico “Ignacio García Téllez” del IMSS de Mérida.
De acuerdo con el reporte, Andrés Díaz Kantún, de 41 años, recibió un balazo en el hemitórax izquierdo. La bala entró en el costado derecho y salió por el izquierdo.
El ataque fue una venganza de José Bernabé Kuk Collí, alias “Cheyene”, porque el jefe policiaco lo había detenido en varias ocasiones y decomisado varios productos robados, el último caso fue el robo de un teléfono celular.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 10 de la noche del sábado en la hacienda Canicab, comisaría de Acanceh. El agente llegó junto con su esposa, Rubí Aké Sulub, a visitar a unos familiares.
Díaz Kantún fue emboscado a las puertas de su casa y, según la Fiscalía General de Justicia, “Cheyene”, quien fue militar, disparó desde el Chevy, placas YZV-21-53.
“Cheyene” disparó al oficial y luego huyó, pero en la noche de ayer la Policía Ministerial reportó su detención, cuando caminaba sobre la calle 39 de esa misma población.
La mujer del comandante pidió ayuda a gritos y, tras el aviso, en minutos llegaron agentes de la Policía Municipal de Acanceh, de la SSP y paramédicos.
Díaz Kantún fue trasladado al IMSS de Acanceh, pero por la gravedad de la lesión fue traído a Mérida donde fue operado. Su estado de salud se reportó como grave.
El “Cheyene” habría utilizado una pistola calibre .9 mm, que es de uso exclusivo de las fuerzas armadas, porque se encontraron casquillos de ese calibre en el lugar. El sujeto tiene asolada a esa zona con varios robos.
Rubí Aké, esposa del agente herido, indicó que el sujeto había jurado vengarse de su esposo por las detenciones.
Según el reporte médico, el estado de salud del oficial es grave, ya que el proyectil alcanzó a lesionar el corazón.
El agente estaba asignado a seguridad ciudadana y en las últimas semanas había participado en operativos contra robos en los que se detuvo al agresor, a quien se le decomisaron varios artículos.
Las corporaciones policiacas desplegaron inusitada vigilancia que incluyó ocho unidades de la SSP, una de Goera, dos motopatrullas e instalaron retenes de vigilancia a la entradas y salidas de Seyé y de Canicab.
El atentado armado creó un clima de miedo y nerviosismo.-
