Noticias de Yucatán
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Daniel Jesús Carrillo Polanco (*)
No cabe duda de que en el transcurso de la semana ocurrieron dos sucesos eminentemente noticiosos que reunieron las características de trascendencia y de interés que generaron para amplias audiencias.
Una de carácter internacional y otra nacional. La primera fue la dimisión del papa Benedicto XVI, dejando a la Iglesia, de manera inédita, sin líder, al menos por un tiempo, mientras se elige a su sucesor; la segunda, la detención de la presidenta vitalicia del SNTE, Elba Esther Gordillo, que sin embargo no es una situación inédita porque han habido casos similares en el devenir histórico.
En relación con el segundo caso, a mi parecer no es otra cosa que una maniobra mediática del gobierno federal priista que constituye un intento de manipulación, de hacer creer y percibir situaciones que no existen.
Me quedé perplejo cuando escuché al titular del Ejecutivo Federal cuando en cadena nacional salió a presumir su firme decisión de demostrar que en México “nadie estará encima de la ley”.
No pretendo ser defensor de Elba Esther Gordillo, porque es una persona indefendible… Lo que no vale es que intenten manipularnos como si fuéramos tontos y que ya nos creímos esa vacilada de que el gobierno priísta sí va a castigar a los corruptos.
No nos vengan con cuentos, la detención de la señora Gordillo fue porque no sólo dejó de ser útil al sistema del PRI, sino que incluso ya se convertía en una amenaza para éste con sus posturas totalmente encontradas por la reforma educativa.
Si en verdad quieren demostrar que en este país nadie estará por encima de la ley, tendrían que proceder de la misma manera contra cientos o miles que hoy detentan puestos en el mismo gobierno federal, en el Senado o el Congreso de la Unión.
No me cabe duda de que el sistema PRI no hubiera procedido contra la señora Gordillo si ésta siguiera dentro de la disciplina del jurásico, como lo hacen tantos y tantos corruptos que siguen haciendo de las suyas con impunidad.
El mismo viejo PRI de siempre. Como no funcionaron la cooptación ni las amenazas, entonces procedía la represión. La detención de la señora Gordillo no es otra cosa que un aviso a todos los corruptos del PRI que intenten rebelarse, como en el presente caso.
Hoy la señora Gordillo ya no le sirve al sistema, dejó de ser coadyuvante de latrocinio rojo y creó el propio, y esto la maquinaria no lo perdona. No vengan con el cuento de que el PRI ahora velará por los intereses de los maestros y de los trabajadores.
Aquí seguimos esperando que Rolando saque los dientes para demostrar la “ferocidad” prometida contra los corruptos del quinquenio pasado, pero eso no sucederá, mientras los saqueadores sigan alineados a la disciplina priísta.
Y tan burda es la postura de que “nadie está por encima de la ley”, que el PRI en realidad no sólo no castiga a los corruptos, sino que incluso los premia. Y ejemplos hay miles, pero no vayamos tan lejos, la ex titular del quinquenio y su comadre, en vez de ser castigadas por toda la afectación pública, fueron premiadas con otros cargos. Hay muchos paralelismos entre la señora de Dzemul y la señora Gordillo, pero ¿por qué no se procede contra la segunda? Cuando se lancen contra algún priísta corrupto o corrupta, aun cuando esté alineado al sistema, entonces yo mismo y millones de mexicanos aplaudiremos la medida y les creeremos. Ahora, para nada.- Mérida, Yucatán.
dajecapo@hotmail.com
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*) Maestro en comunicación política y marketing electoral y consejero estatal del PAN
La detención de Elba Esther Gordillo no es otra cosa que una maniobra mediática del gobierno federal priísta, un intento de manipulación…
