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PROGRESO.— El Centro de Desarrollo Infantil (Cendi) No. 8, del Isstey, tendrá su último día de labores en el puerto el jueves 30, informó María Consuelo Martínez Ordaz, directora del plantel.
Sobre la situación de las 100 empleadas, añadió que ignora que pasará.
“Se está viendo reubicar a la gente y en mi caso, estamos a la espera de recibir órdenes del Isstey”, indicó.
El plantel, con capacidad para 195 niños, labora con 42 y sigue trabajando de manera normal.
Consuelo Martínez recordó que el Cendi del Isstey abrió sus puertas el 29 de septiembre de 2009, durante la administración de la ex gobernadora Ivonne Aracelly Ortega Pacheco.
Tanto el Cendi No. 8 como el No. 9, en Motul, cerrarán sus puertas una vez que concluya el ciclo escolar pues la ocupación se fue a la baja.
La operación de los Cendis en esas condiciones implicaría un aumento en los costos por alumnos. En el ciclo escolar pasado, el costo fue de $6,275 mensuales en Progreso, y $6,512 en Motul.
Esta situación resulta insostenible y no recomendable para las finanzas del Isstey, porque afectaría la prestación en el largo plazo de sus prestaciones como las médicas y de pensiones.
Consuelo Martínez dijo que para no afectar a los infantes ya inscritos para el ciclo escolar 2015-2016 se informó a los padres de familia sobre las diversas alternativas que les ofrecieron como reubicarlos en Cendis de Mérida e incluso transportarlos en una unidad para ello.
En el caso del nivel maternal 3, la Secretaría de Educación de Yucatán (Segey) ofreció los espacios para incorporar a quienes así lo requieran.
En Motul, el cierre del Cendi No. 9 generó un descontento en las personas que gozaban de esa prestación, así como de la comunidad en general por cerrerarse una fuente de empleo.
Simón Pool Ciau, un vecino, señaló que el edificio se puede aprovechar, por medio de la formación de una asociación civil que gestione y administre una estancia infantil de la Sedesol federal.
—En esta ciudad funcionan varias estancias infantiles de Sedesol, al parecer son costeables, y de paso aprovechar la mano de trabajo profesional que existe del ramo que quedaran desempleadas y ya están capacitados —explicó.
Carlos René Contreras Gamboa señaló que un edificio tan costoso se convierta en un elefante blanco más.
—Qué lástima que se inviertan tantos recursos para nada y ahora sea presa de la maleza que lo cubrirá como los hospitales inconclusos de Ticul y Tekax.
A los padres de familia de los alumnos que todavía quedan en la escuela, les informaron que a fines de mes la escuela dejará de funcionar, por lo que deberán inscribir a sus hijos en otras instituciones.
Fernando Río Rosado, representante del Isstey, informó en un comunicado que se desconoce cuál será el destino del edificio.
El Cendi de esta ciudad, al igual que el de Progreso, fue inaugurado en 2009.
Luego de tres años de operaciones, más de la mitad de empleados comenzaron a ser despedidos con el fin de adelgazar la nómina, hasta que se dio el cierre.
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