Todo parece indicar que el enverjado que hace casi seis años fue instalado en la Catedral jamás ha recibido mantenimiento de las autoridades y, hoy día, luce en deplorables condiciones que dañan la imagen del Centro Histórico de Mérida y del propio templo.Evidente desidia de las autoridades para corregir los daños
Enverjado que la rodea está en deplorables condiciones
La Catedral de Yucatán, dedicada a San Ildefonso, como todos sabemos, es la sede de la Arquidiócesis de Yucatán y la primera levantada en la América continental, y también la más antigua de México.
Cabe recordar que el enverjado se instaló durante la administración de César Bojórquez Zapata (2007-2010). En 2009, poco después de que fue estrenado el enverjado registró severos daños cuando, a propuesta de la entonces gobernadora, Ivonne Ortega Pacheco, se filmó en la Catedral para de un episodio de la telenovela “El Sortilegio”, ya que la gente que acudió al sitio para ver a los artistas de Televisa, se colgó de las piezas y las dañaron.
En 2010, durante la gestión de Angélica Araujo Lara, informó en un boletín que había logrado un acuerdo con la empresa Alcica, S.A. de C.V que fabricó la reja, de modo que ésta haría las reparaciones, en 83 metros de reja dañados, calculadas en $800,000, sin costo para la Comuna.
En el boletín se informaba que la reja era de aluminio y sería cambiada por otra de hierro fundido más resistente. Sin embargo, cabe señalar, que según consta en Internet, cuando se colocó la reja con Bojórquez Zapata, en todo momento se afirmó que el material era hierro fundido.
Hoy estuvimos en el lugar de los hechos y confirmamos que no solo se trata de partes oxidadas o despintadas, sino que el daño es bastante grave sobre todo en los extremos norte y sur de esa reja, en donde piezas completas han sido desprendidas dejando ver grandes agujeros que dan una mala imagen a propios y extraños, que se la pasan tomando fotos y vídeos, y esta es la imagen que se llevan a sus lugares de origen dentro y fuera de México.
Lo que en su momento se hizo para embellecer el entorno de la Catedral, con la idea de devolverle su antigua imagen colonial, hoy día no sólo es un “lunar” sino que además evidencia el poco interés de las autoridades para que este atractivo turístico luzca bien.
