Su cómplice, Rodrigo Vázquez Gallareta no corrió con la misma suerte porque está amparado y se suspendió el proceso en su contra.
Ambos están recluídos en el Centro Especializado en la Aplicación de Medidas para Adolescentes (Ceama) por el secuestro cometido en marzo pasado.
A lo largo del proceso la Fiscalía ha pedido que se les aplique la pena máxima para adolescentes, que es de 15 años.
Por lo pronto uno de ellos ya fue hallado culpable y se espera que el 29 de junio se defina cuántos años de prisión se le impondrán.
Durante la semana que duró este juicio, la jueza de juicio oral especializada en este sistema, Manuela Chiu Dorantes, pudo apreciar las pruebas testimoniales, periciales y
documentales para llegar a este fallo.
La ley de justicia para adolescentes establece que, para determinar las medidas a imponer en los casos de fallos de responsabilidad penal, es necesario que el juzgador tome en cuenta un dictamen técnico del adolescente, así como pondere el grado de responsabilidad y las circunstancias del caso concreto, para que la aplicación de las medidas sean proporcionales.
El dictamen técnico lo elabora un Consejo técnico interdisciplinario,dependiente del Centro Especializado en Aplicación de Medidas para Adolescentes (CEAMA), el cual se compone de especialistas en las áreas de medicina, psicología, formación laboral, trabajo social y educación. Este informe deberá rendirse al juzgado en los 10 días siguientes al fallo de ayer.
