Estudios han demostrado que medio millón de mujeres muere por causa del cáncer de mama, este tipo de uno de los más comunes y que mueren más mujeres, por esta razón es fundamental tomar las precauciones necesarias para prevenirlo y diagnosticarlo a tiempo.
El cáncer de mama es una proliferación maligna de las células epiteliales que revisten los conductos o lobulillos mamarios, estos conductos forman parte de más de las 10 secciones que conforman la mama, y estos contienen las glándulas productoras de leche durante el periodo de lactancia.
Estos conductos se encuentran ubicados en el estroma, un tejido adiposo en el que también se ubican los vasos sanguíneos y linfáticos, que van a los ganglios linfáticos, el cáncer de mama se desarrolla cuando as células del epitelio glandular se reproducen de forma incontrolada y muy rápidamente, pudiendo viajar a gran velocidad a través del torrente sanguíneo a otras partes del cuerpo y posteriormente hacer metástasis.
El origen del cáncer de mama aún no ha sido descubierto, sin embargo existen ciertos factores de riesgo como la obesidad, consumo de alcohol, estar expuesto a radiaciones ionizantes, densidad mamaria, no haber dado a luz nunca y diversos factores genéticos.
Recientemente también fue sumado a los factores de riesgo de padecer cáncer de mama, el consumo de leche. Un estudio científico realizado en Noruega arrojó que aquellas personas que consumían con frecuencia al menos tres vasos de leche diariamente, desarrollaron la enfermedad, y muy por el contrario aquellas personas que solo consumían un vaso de leche al día, no mostraron ningún signo de desarrollo temprano de esta enfermedad.
Por lo que se considera de vital importancia estar atentos a todos los factores que inciden en su aparición, así como también en las formas de prevención. Según varios comunicados de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la auto exploración y las malograrías son las herramientas fundamentales para detectar bultos sospechosos en las mamas, ya que estos son el principal síntoma de aparición de este tipo de cáncer junto con las alteraciones de la piel de la mama o la retracción del pezón.
El cáncer de mama es una proliferación maligna de las células epiteliales que revisten los conductos o lobulillos mamarios, estos conductos forman parte de más de las 10 secciones que conforman la mama, y estos contienen las glándulas productoras de leche durante el periodo de lactancia.
Estos conductos se encuentran ubicados en el estroma, un tejido adiposo en el que también se ubican los vasos sanguíneos y linfáticos, que van a los ganglios linfáticos, el cáncer de mama se desarrolla cuando as células del epitelio glandular se reproducen de forma incontrolada y muy rápidamente, pudiendo viajar a gran velocidad a través del torrente sanguíneo a otras partes del cuerpo y posteriormente hacer metástasis.
El origen del cáncer de mama aún no ha sido descubierto, sin embargo existen ciertos factores de riesgo como la obesidad, consumo de alcohol, estar expuesto a radiaciones ionizantes, densidad mamaria, no haber dado a luz nunca y diversos factores genéticos.
Recientemente también fue sumado a los factores de riesgo de padecer cáncer de mama, el consumo de leche. Un estudio científico realizado en Noruega arrojó que aquellas personas que consumían con frecuencia al menos tres vasos de leche diariamente, desarrollaron la enfermedad, y muy por el contrario aquellas personas que solo consumían un vaso de leche al día, no mostraron ningún signo de desarrollo temprano de esta enfermedad.
Por lo que se considera de vital importancia estar atentos a todos los factores que inciden en su aparición, así como también en las formas de prevención. Según varios comunicados de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la auto exploración y las malograrías son las herramientas fundamentales para detectar bultos sospechosos en las mamas, ya que estos son el principal síntoma de aparición de este tipo de cáncer junto con las alteraciones de la piel de la mama o la retracción del pezón.