Según se informa en Formal Prisión, hasta ahora el individuo permanece en calidad de desconocido y se sospecha que no es de la comunidad, pues nadie ha reportado a ningún desaparecido.
El hallazgo ocurrió cuando Carlos Canché Cua acudió a su rancho para checar el chapeo de los jornaleros.
Al pasar cerca de un pozo sintió un olor fétido y al asomarse por el brocal vio que algo flotaba en el agua.
Al lugar llegaron agentes de la Policía Municipal y constataron que se trataba de un cuerpo humano. Más tarde llegaron elementos de la FGE y del Servicio Médico Forense. El rescate estuvo a cargo de los bomberos.
Según se dijo, el desconocido tenía de dos a tres semanas de fallecido, por lo cual el cuerpo estaba demasiado putrefacto.
