Hace unas horas comenzaron a circular en redes estas imágenes donde se puede ver al funcionario de gobierno, Javier Araujo, en pleno pleito con personas del bar Pipiripau, localizado en el centro de Mérida.
Lo que comenzó como una simple bronca de borrachos terminó con amenazas e insultos, ya que el señor Araujo utilizando todo su poder como "amigo del gobernador" amenazó con cerrar el lugar argumentando que no sabían con quien se estaban metiendo.
"Son unos gatos" "este antro es una mierda" estas son algunas de las cosas que gritaba mientras los demás asistentes a golpes y empujones lo sacaban del lugar.