Noticias de Yucatán
MONCLOVA, Coah. (apro).- Identificados por Andrés Manuel López Obrador como “la mafia del poder”, los magnates mexicanos que han incursionado en la minería pueden estar tranquilos porque el candidato presidencial les ha ofrecido la reconciliación.
Así, Carlos Slim, Alberto Bailleres, Alonso Ancira e inclusive Germán Larrea Mota Velasco, y hasta las mineras canadienses, encontrarán en el tabasqueño una oportunidad en su búsqueda de reconciliarse con los trabajadores del sector.
Se trata de construir un acuerdo ambiental y mejores condiciones laborales, según López Obrador, quien en esta ciudad acerera lanzó el guiño a los empresarios.
Excepto por eso, la inclusión de Napoleón Gómez Urrutia como segundo lugar en la lista de candidatos al Senado por Morena no le redituó al candidato presidencial.
Ayer, en Gómez Palacio, Durango, durante el acto de campaña que realizó ahí, apenas se juntaron alrededor de 70 hombres vestidos con camisetas rojas, quienes se hacían notar por sus porras en una concentración de 5 mil, principalmente miembros del Partido del Trabajo (PT).
El contingente, con estandarte y las camisetas estampadas, pertenecía a la Sección 22 del Sindicato Minero que dirige desde el exilio Gómez Urrutia, quien ya perdió su fuerza regional en la base de obreros de la siderúrgica Met Mex Peñoles.
Y hoy, durante su visita a esta ciudad, sede de las históricas secciones 147 y 288, apenas se reunieron unos 50 napistas, que también, sólo por sus porras, se hacían notar en la concentración de unas mil 500 personas.
En ambas empresas, las dirigencias seccionales dejaron atrás el conflicto de Gómez Urrutia y se separaron del sindicato que dirige.
El tema de la minería del carbón, que en los últimos 12 años ha cobrado alrededor de 200 víctimas, fue abordado por el candidato al Senado, Armando Guadiana Tijerina, que junto con eso también defendió la extracción de gas, afirmando que promoverán inversiones en el sector.
López Obrador no descalificó a Guadiana, por el contrario, argumentó que su interés era fortalecer el mercado interno, con un guiño claro a Alonso Ancira, presidente de la siderúrgica AHMSA, al afirmar que apoyaría a todos los empresarios acereros mexicanos… pero el único es Ancira, porque los demás vendieron a transnacionales.
MONCLOVA, Coah. (apro).- Identificados por Andrés Manuel López Obrador como “la mafia del poder”, los magnates mexicanos que han incursionado en la minería pueden estar tranquilos porque el candidato presidencial les ha ofrecido la reconciliación.
Así, Carlos Slim, Alberto Bailleres, Alonso Ancira e inclusive Germán Larrea Mota Velasco, y hasta las mineras canadienses, encontrarán en el tabasqueño una oportunidad en su búsqueda de reconciliarse con los trabajadores del sector.
Se trata de construir un acuerdo ambiental y mejores condiciones laborales, según López Obrador, quien en esta ciudad acerera lanzó el guiño a los empresarios.
Excepto por eso, la inclusión de Napoleón Gómez Urrutia como segundo lugar en la lista de candidatos al Senado por Morena no le redituó al candidato presidencial.
Ayer, en Gómez Palacio, Durango, durante el acto de campaña que realizó ahí, apenas se juntaron alrededor de 70 hombres vestidos con camisetas rojas, quienes se hacían notar por sus porras en una concentración de 5 mil, principalmente miembros del Partido del Trabajo (PT).
El contingente, con estandarte y las camisetas estampadas, pertenecía a la Sección 22 del Sindicato Minero que dirige desde el exilio Gómez Urrutia, quien ya perdió su fuerza regional en la base de obreros de la siderúrgica Met Mex Peñoles.
Y hoy, durante su visita a esta ciudad, sede de las históricas secciones 147 y 288, apenas se reunieron unos 50 napistas, que también, sólo por sus porras, se hacían notar en la concentración de unas mil 500 personas.
En ambas empresas, las dirigencias seccionales dejaron atrás el conflicto de Gómez Urrutia y se separaron del sindicato que dirige.
El tema de la minería del carbón, que en los últimos 12 años ha cobrado alrededor de 200 víctimas, fue abordado por el candidato al Senado, Armando Guadiana Tijerina, que junto con eso también defendió la extracción de gas, afirmando que promoverán inversiones en el sector.
López Obrador no descalificó a Guadiana, por el contrario, argumentó que su interés era fortalecer el mercado interno, con un guiño claro a Alonso Ancira, presidente de la siderúrgica AHMSA, al afirmar que apoyaría a todos los empresarios acereros mexicanos… pero el único es Ancira, porque los demás vendieron a transnacionales.