Noticias de Yucatán
Cuando los músculos de la pared abdominal de un bebé no se forman adecuadamente al inicio de la gestación, pueden nacer con los órganos expuestos por un orificio al lado del ombligo. Ese fue el caso de una bebé nacida en el Instituto Mexicano del Seguro Social en Yucatán que tenía expuestos el estómago, vejiga e intestinos grueso y delgado.
Los médicos del IMSS Yucatán relataron que este padecimiento se conoce como gastrosquisis. La niña nació en octubre del año pasado y su condición era grave y de alto riesgo, no sólo por el nacimiento prematuro y bajo peso --un kilo 600 gramos--, sino por las dos cirugías que se debían realizar de forma urgente para colocar dichos órganos en su lugar.
Los doctores Juan Buenaventura Xequé Alamilla y Alejandra Guadalupe Alcocer Aguilar, jefes de la División de Pediatría y de Neonatología, respectivamente, de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) en Yucatán, indicaron que el problema se le detectó desde la gestación de forma oportuna por médicos de la Unidad de Medicina Familiar No. 57 "La Ceiba", a través de un ultrasonido realizado a la madre de 20 años de edad en la consulta de control prenatal, por lo que fue canalizada a la UMAE con especialistas en Perinatología.
Esta malformación requería de cirugía al momento de nacer, por lo que se programó la cesárea a las 36 semanas de gestación. En cuanto nació, fue trasladada a la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales para realizarle la primera cirugía, en la que colocaron una cubierta y una semana después, cuando creció la cavidad del abdomen, se practicó la siguiente operación, en donde juntaron los músculos del abdomen y se realizó el cierre del mismo.
Al haber tenido una exposición al líquido amniótico durante la de gestación, la bebé presentó inflamación y al no haber una movilidad natural de los intestinos, ya que al realizar la cirugía están paralizados, se le dio alimentación por vía intravenosa por dos semanas.
Lo más complicado al realizar una cirugía a un bebé tan pequeño es que su tejido es muy delgado y frágil, sin embargo, en la UMAE del Seguro Social contamos con un equipo multidisciplinario experto en cuidado neonatal y en cirugías de este tipo, además de la instrumentación que es especializada para bebés, puntualizó el doctor Xequé Alamilla.
Cuando los músculos de la pared abdominal de un bebé no se forman adecuadamente al inicio de la gestación, pueden nacer con los órganos expuestos por un orificio al lado del ombligo. Ese fue el caso de una bebé nacida en el Instituto Mexicano del Seguro Social en Yucatán que tenía expuestos el estómago, vejiga e intestinos grueso y delgado.
Los médicos del IMSS Yucatán relataron que este padecimiento se conoce como gastrosquisis. La niña nació en octubre del año pasado y su condición era grave y de alto riesgo, no sólo por el nacimiento prematuro y bajo peso --un kilo 600 gramos--, sino por las dos cirugías que se debían realizar de forma urgente para colocar dichos órganos en su lugar.
Los doctores Juan Buenaventura Xequé Alamilla y Alejandra Guadalupe Alcocer Aguilar, jefes de la División de Pediatría y de Neonatología, respectivamente, de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) en Yucatán, indicaron que el problema se le detectó desde la gestación de forma oportuna por médicos de la Unidad de Medicina Familiar No. 57 "La Ceiba", a través de un ultrasonido realizado a la madre de 20 años de edad en la consulta de control prenatal, por lo que fue canalizada a la UMAE con especialistas en Perinatología.
Esta malformación requería de cirugía al momento de nacer, por lo que se programó la cesárea a las 36 semanas de gestación. En cuanto nació, fue trasladada a la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales para realizarle la primera cirugía, en la que colocaron una cubierta y una semana después, cuando creció la cavidad del abdomen, se practicó la siguiente operación, en donde juntaron los músculos del abdomen y se realizó el cierre del mismo.
Al haber tenido una exposición al líquido amniótico durante la de gestación, la bebé presentó inflamación y al no haber una movilidad natural de los intestinos, ya que al realizar la cirugía están paralizados, se le dio alimentación por vía intravenosa por dos semanas.
Lo más complicado al realizar una cirugía a un bebé tan pequeño es que su tejido es muy delgado y frágil, sin embargo, en la UMAE del Seguro Social contamos con un equipo multidisciplinario experto en cuidado neonatal y en cirugías de este tipo, además de la instrumentación que es especializada para bebés, puntualizó el doctor Xequé Alamilla.