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El gobierno de Puebla tomó el control de la seguridad en el municipio de Tehuacán, donde los uniformados serán investigados por sus presuntos vínculos en casos de secuestros, homicidios y asaltos.
Tehuacán es la segunda ciudad más importante del estado y es gobernada por la alcaldesa emanada del PRI, Ernestina Fernández.
Fue a las ocho de la mañana de ayer cuando el titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Jesús Morales Rodríguez, y cientos de policías estatales se concentraron en el ayuntamiento, donde se encuentra la comandancia de la corporación.
“Tomamos el control del penal, de la Dirección de la Policía, de la Dirección de Tránsito y el Centro de Respuesta Inmediata [número de emergencia]”, indicó Morales.
El mando estatal informó que los agentes municipales fueron trasladados a la capital poblana para aplicarles pruebas de control de confianza, además de corroborar que estén dados de alta como uniformados.
Abundó que el municipio tiene 368 policías y hasta ahora 20 no pasaron las pruebas de control de confianza, además de que usurpaban funciones.
“Elementos que estén vinculados a hechos delictivos serán trasladados al Ministerio Público. Vamos a tomar el centro de respuesta inmediata de Tehuacán, además de otras áreas de seguridad pública”, sentenció.
Durante el operativo se encontraron cinco vehículos con reporte de robo que fueron recuperados y se detuvo a 13 personas.
Morales Rodríguez explicó que otra irregularidad que se encontró fue que el Centro de Emergencia de Respuesta Inmediata (CERI) y el número de la Policía Municipal no estaban conectados al C5 de Puebla.
Esta incursión del gobierno estatal en corporaciones municipales es la tercera, después de San Martín Texmelucan y Chalchicomula de Sesma, donde a raíz de diferentes hechos delictivos ha salido a la luz la presunta participación de policías municipales, además de otras irregularidades en los que están involucrados mandos de esas corporaciones.
“Municipios contaminados”. La decisión de tomar la seguridad de Tehuacán a través de las policías Estatal y Federal, además del Ejército, se sustenta mediante el decreto que emitió el gobernador José Antonio Gali Fayad, quien reconoció que muchos municipios, como Tehuacán, están contaminados por la incidencia delictiva, por eso se requiere de mano dura para abatirlos. El mandatario señaló que al inicio de su gestión sabía que se enfrentaría al robo de combustible y asalto a trenes en algunas regiones del estado.
“Muchos de los municipios desgraciadamente ya vienen contaminados desde hace mucho tiempo. Hay que decirlo, pusimos el dedo en la llaga en San Martín Texmelucan y las cosas han cambiado, el estado tiene que ser firme en el combate a la inseguridad”, afirmó Gali.
Zona de riesgo. San Martín Texmelucan fue el primer municipio tomado por el gobierno de Puebla en mayo pasado, cuando se detectó que 113 policías (algunos mandos altos) estaban coludidos con criminales.
La región está en la zona del Triángulo Rojo, donde creció el robo y venta de combustible, aumentaron los enfrentamientos entre elementos de seguridad con delincuentes, además de la aparición de desmembrados.
En junio pasado ocurrió lo mismo con 36 policías de Chalchicomula de Sesma —entre ellos un comandante— a quienes les aplicaron pruebas de control de confianza para descartar sus vínculos en delitos como secuestro, homicidios y asalto a trenes.
Será hasta diciembre próximo cuando el gobierno de Puebla mantenga el control de la seguridad, pues ello se establece en los decretos publicados en el Periódico Oficial de la entidad.
Fuente: El universal
El gobierno de Puebla tomó el control de la seguridad en el municipio de Tehuacán, donde los uniformados serán investigados por sus presuntos vínculos en casos de secuestros, homicidios y asaltos.
Tehuacán es la segunda ciudad más importante del estado y es gobernada por la alcaldesa emanada del PRI, Ernestina Fernández.
Fue a las ocho de la mañana de ayer cuando el titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Jesús Morales Rodríguez, y cientos de policías estatales se concentraron en el ayuntamiento, donde se encuentra la comandancia de la corporación.
“Tomamos el control del penal, de la Dirección de la Policía, de la Dirección de Tránsito y el Centro de Respuesta Inmediata [número de emergencia]”, indicó Morales.
El mando estatal informó que los agentes municipales fueron trasladados a la capital poblana para aplicarles pruebas de control de confianza, además de corroborar que estén dados de alta como uniformados.
Abundó que el municipio tiene 368 policías y hasta ahora 20 no pasaron las pruebas de control de confianza, además de que usurpaban funciones.
“Elementos que estén vinculados a hechos delictivos serán trasladados al Ministerio Público. Vamos a tomar el centro de respuesta inmediata de Tehuacán, además de otras áreas de seguridad pública”, sentenció.
Durante el operativo se encontraron cinco vehículos con reporte de robo que fueron recuperados y se detuvo a 13 personas.
Morales Rodríguez explicó que otra irregularidad que se encontró fue que el Centro de Emergencia de Respuesta Inmediata (CERI) y el número de la Policía Municipal no estaban conectados al C5 de Puebla.
Esta incursión del gobierno estatal en corporaciones municipales es la tercera, después de San Martín Texmelucan y Chalchicomula de Sesma, donde a raíz de diferentes hechos delictivos ha salido a la luz la presunta participación de policías municipales, además de otras irregularidades en los que están involucrados mandos de esas corporaciones.
“Municipios contaminados”. La decisión de tomar la seguridad de Tehuacán a través de las policías Estatal y Federal, además del Ejército, se sustenta mediante el decreto que emitió el gobernador José Antonio Gali Fayad, quien reconoció que muchos municipios, como Tehuacán, están contaminados por la incidencia delictiva, por eso se requiere de mano dura para abatirlos. El mandatario señaló que al inicio de su gestión sabía que se enfrentaría al robo de combustible y asalto a trenes en algunas regiones del estado.
“Muchos de los municipios desgraciadamente ya vienen contaminados desde hace mucho tiempo. Hay que decirlo, pusimos el dedo en la llaga en San Martín Texmelucan y las cosas han cambiado, el estado tiene que ser firme en el combate a la inseguridad”, afirmó Gali.
Zona de riesgo. San Martín Texmelucan fue el primer municipio tomado por el gobierno de Puebla en mayo pasado, cuando se detectó que 113 policías (algunos mandos altos) estaban coludidos con criminales.
La región está en la zona del Triángulo Rojo, donde creció el robo y venta de combustible, aumentaron los enfrentamientos entre elementos de seguridad con delincuentes, además de la aparición de desmembrados.
En junio pasado ocurrió lo mismo con 36 policías de Chalchicomula de Sesma —entre ellos un comandante— a quienes les aplicaron pruebas de control de confianza para descartar sus vínculos en delitos como secuestro, homicidios y asalto a trenes.
Será hasta diciembre próximo cuando el gobierno de Puebla mantenga el control de la seguridad, pues ello se establece en los decretos publicados en el Periódico Oficial de la entidad.
Fuente: El universal
