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Salió el primer interesado. Gustavo Jiménez Pons, dueño de la empresa GBS Air Enterprises y exaspirante independiente a la Presidencia en este año, entregó una carta de intención al Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), para comprar el avión presidencial TP01, en mil 900 millones de pesos.
El empresario y también excandidato al Gobierno de la Ciudad de México en 2006, dijo que quiere el aparato para rentarlo como un taxi aéreo de lujo a presidentes de otros países que no tienen aeronaves privadas o a bandas de rock como los Rolling Stones. “Podemos invertir lo que se pagó por el avión presidencial: mil 900 millones de pesos”, detalló.
Jiménez Pons ha estado en medio de la polémica como empresario y candidato. Estuvo preso en tres ocasiones por abuso de confianza, usurpación de profesión y fraude, de acuerdo con archivos judiciales que publicó el diario El Universal en junio de 2006. Sobre su pasado, dijo que sus aprehensiones ocurrieron como “víctima de actos de corrupción”.
La primera ocasión fue interno del Reclusorio Oriente, en 1994. Dijo tener 32 años, ser empresario y estar casado. Fue procesado por abuso de confianza. Luego de cuatro meses salió libre, bajo caución.
En 1995 estuvo dos días en la cárcel por usurpación de profesión. En el 96 regresó al Reclusorio Sur donde estuvo cuatro meses; en los registros se indica que usó varios nombres. El empresario reconoció los tres casos en los que estuvo detenido.
En 2006, como candidato del Partido Social Demócrata al Gobierno de la Ciudad de México, fue denunciado por fraude en venta de boletos para el Mundial de Alemania y por la compra-venta de vehículos.
En campaña, AMLO dijo que el aparato costaba siete mil 500 millones de pesos (incluidos costos de operación y mantenimiento), monto que se espera sería total al terminar de pagarlo.
Fuente Informador MX
