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Un hotel de lujo, concebido como el lugar ideal para divorcios sin mucho estrés, abrirá sus puertas en Australia en 2019, reporta Sydney Morning Herald. El CEO de la compañía responsable, el británico Jim Halvens, dijo en un programa de la televisión australiana Sunrise que la idea de crear un hotel donde se pudiera arreglar relajadamente un divorcio se le ocurrió cuando fue testigo del desastroso proceso que para ello atravesó un amigo suyo.
El proyecto ya lo hizo realidad en Holanda, hace siete años, y luego en EE.UU. y el Reino Unido.
La concepción del 'Divorce Hotel' es simple: al decidir disolver su matrimonio, los cónyuges reservan una habitación cinco estrellas para alcanzar de manera benévola y respetuosa un acuerdo mutuamente satisfactorio. Abogados y psicólogos los libran de innecesarios dolores de cabeza. Jim Halvens cree que es "mucho más cómodo que encontrarse en una estúpida oficina, bajo una atmósfera no alentadora".
Una reserva estándar para divorciarse 'amablemente' cuesta entre 7.000 dólares y 13.000 dólares por un fin de semana.
Un hotel de lujo, concebido como el lugar ideal para divorcios sin mucho estrés, abrirá sus puertas en Australia en 2019, reporta Sydney Morning Herald. El CEO de la compañía responsable, el británico Jim Halvens, dijo en un programa de la televisión australiana Sunrise que la idea de crear un hotel donde se pudiera arreglar relajadamente un divorcio se le ocurrió cuando fue testigo del desastroso proceso que para ello atravesó un amigo suyo.
El proyecto ya lo hizo realidad en Holanda, hace siete años, y luego en EE.UU. y el Reino Unido.
La concepción del 'Divorce Hotel' es simple: al decidir disolver su matrimonio, los cónyuges reservan una habitación cinco estrellas para alcanzar de manera benévola y respetuosa un acuerdo mutuamente satisfactorio. Abogados y psicólogos los libran de innecesarios dolores de cabeza. Jim Halvens cree que es "mucho más cómodo que encontrarse en una estúpida oficina, bajo una atmósfera no alentadora".
Una reserva estándar para divorciarse 'amablemente' cuesta entre 7.000 dólares y 13.000 dólares por un fin de semana.
