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El huracán “Michael” arremetió ayer con categoría 4 contra la franja noroeste de la Florida acompañado de vientos de hasta 250 kilómetros por hora que destruyeron casas y sumergieron vecindarios, para luego continuar su sendero de destrucción por el sureste de Estados Unidos.
Se trata del ciclón con más fuerza que ha impactado el área continental estadounidense en casi 50 años y, según reportes de las autoridades, ocasionó la muerte de por lo menos una persona.
Luego de ganar fuerza debido a un mar inusualmente cálido en el Golfo de México, el huracán tocó tierra poco después del mediodía cerca de Mexico Beach, una comunidad turística con pocos habitantes, playas de arena blanca, pueblos de pescadores y bases militares.
Después de azotar la Florida, “Michael” ingresó al sur de Georgia y se degradó a categoría 3, la más poderosa que se tenga registro en ese estado.
Más tarde el meteoro se debilitó a categoría 1 y emergieron reportes de posibles tornados en la región central de Georgia.
El huracán golpeó la costa de la Florida con lluvias laterales, ráfagas poderosas y fuertes olas. Inundó calles y muelles, derribó árboles, esparció ramas y hojas, dejó sin electricidad a más de 380,000 hogares y comercios, destrozó marquesinas y envió tejas por los aires. Se escucharon explosiones, al parecer causadas por transformadores.
Un residente de la Florida murió luego de que un árbol cayera sobre su casa, informó la portavoz de la policía del condado Gadsden, Anglie Hightower. Señaló que las autoridades recibieron un reporte la tarde de ayer de un hombre atrapado, pero las cuadrillas de rescate tuvieron problemas para llegar al lugar debido a los escombros y árboles caídos que bloqueaban los caminos. Se registraron daños extensos en Panama City, incluyendo árboles arrancados de raíz y caída de cables eléctricos en prácticamente todo el lugar.
El gobernador de Florida, Rick Scott, solicitó ayer al presidente Donald Trump una declaración de desastre mayor con el fin de agilizar recursos del gobierno federal.
Scott ya había solicitado a Trump una declaración de emergencia previa a la llegada de “Michael” para 14 condados floridanos.
El huracán “Michael” arremetió ayer con categoría 4 contra la franja noroeste de la Florida acompañado de vientos de hasta 250 kilómetros por hora que destruyeron casas y sumergieron vecindarios, para luego continuar su sendero de destrucción por el sureste de Estados Unidos.
Se trata del ciclón con más fuerza que ha impactado el área continental estadounidense en casi 50 años y, según reportes de las autoridades, ocasionó la muerte de por lo menos una persona.
Luego de ganar fuerza debido a un mar inusualmente cálido en el Golfo de México, el huracán tocó tierra poco después del mediodía cerca de Mexico Beach, una comunidad turística con pocos habitantes, playas de arena blanca, pueblos de pescadores y bases militares.
Después de azotar la Florida, “Michael” ingresó al sur de Georgia y se degradó a categoría 3, la más poderosa que se tenga registro en ese estado.
Más tarde el meteoro se debilitó a categoría 1 y emergieron reportes de posibles tornados en la región central de Georgia.
El huracán golpeó la costa de la Florida con lluvias laterales, ráfagas poderosas y fuertes olas. Inundó calles y muelles, derribó árboles, esparció ramas y hojas, dejó sin electricidad a más de 380,000 hogares y comercios, destrozó marquesinas y envió tejas por los aires. Se escucharon explosiones, al parecer causadas por transformadores.
Un residente de la Florida murió luego de que un árbol cayera sobre su casa, informó la portavoz de la policía del condado Gadsden, Anglie Hightower. Señaló que las autoridades recibieron un reporte la tarde de ayer de un hombre atrapado, pero las cuadrillas de rescate tuvieron problemas para llegar al lugar debido a los escombros y árboles caídos que bloqueaban los caminos. Se registraron daños extensos en Panama City, incluyendo árboles arrancados de raíz y caída de cables eléctricos en prácticamente todo el lugar.
El gobernador de Florida, Rick Scott, solicitó ayer al presidente Donald Trump una declaración de desastre mayor con el fin de agilizar recursos del gobierno federal.
Scott ya había solicitado a Trump una declaración de emergencia previa a la llegada de “Michael” para 14 condados floridanos.
