Michael Carroll había pasado 57 años sin su padre, no sabía nada de él desde que tenía 8 meses de nacido y la única respuesta era que los había abandonado. Este año, descubrió que su padre desaparecido estuvo enterrado todo ese tiempo en el sótano de su casa.
El hombre quería saber que había pasado con su padre por un fuerte presentimiento que tenía desde pequeño. Le dijeron que había abandonado la casa en Long Island en 1925.
George Caroll era un enigma y un fantasma para sus cuatros hijos hasta que Michael tuvo un golpe de suerte en pleno día de Halloween en su casa.
El misterio que cumplía 57 años y que habia estado bajo llave durante todo ese tiempo se revelaría en el sótano de la vivienda.
En todos esos años en que Michael y sus tres hermanos habían vivido ahí les daba la sensación de que ocurriá algo en su propiedad que no les dejaba dormir y que les perseguia por cada pasillo y habitación.
Su madre Dorothy, quien falleció en 1998 nunca les contó mucho sobre su padre, un veterano de la Guerra de Corea.
Solo les dijo que se había ido un día y que jamás había regresado; otros familiares que a lo mejor había regresado a Corea del Sur y alguien señaló que estaba en el sótano de su casa.
La desaparición de su padre los obsesionó siempre. Su "abandono" fue algo que los marcó demasiado.
Incluso visitaron psíquicos y personas dedicadas a la actividad paranormal para llegar a una conclusión.
Fue un día en un 'cazafantasmas' llegó a la casa y señaló una fuerte energía en el sótano.
"La energía está aquí", dijo el hombre señalando un lugar en el sótano, cuando ya rendidos recordaron aquella siniestra historia respecto de aquel lugar de su casa.
El 30 de octubre, justo en Halloween, realizaron una excavación y descubrieron un esqueleto. Estaba intacto y completo. La confirmación de las sospechas llegaron esta semana. Las autoridades del Condado de Suffolk confirmaron que se trataba de los restos de George Carroll.
"Pudimos determinar que la causa de la muerte incluyó impactos bruscos en la cabeza con fracturas del cráneo y lesiones cerebrales, aunque puede haber otras lesiones que ya no son detectables", dijo el Médico Examinador del condado, Michael Caplan en declaraciones al diario News Day.
Había sido un asesinato. Pero, ¿quién había sido el autor?
Uno de los hermanos de Michael, Steven, dijo que estaba impactado por la novedad.
"Esto ha sido un largo viaje… pero aún así es duro escuchar esto", dijo respecto a cómo murió su padre. Tenía 5 años cuando el "hombre de la casa" desapareció.
"Estoy feliz de saber que ese es mi papá. Esto es una cosa profundamente emocional y todo el mundo está luchando con esto de manera diferente. Esto ha quebrado a mi familia", dijo Michael.
Pero la verdad sobre lo que ocurrió o quién lo asesinó es muy difícil de conocer. Quien pudiera haber conocido todo murió a principios de este año. Su nombre: Richard Darress, el segundo marido de Dorothy, de quien se separó a principios de los 80.
Con Darress se casó tiempo después de la desaparición de George. Tuvieron un hijo. Era un conductor de camiones de larga distancia y luego de su divorcio se mudó a Nuevo Laredo, México, cerca de la frontera con Texas.
¿Se llevó a la tumba el secreto de quién había terminado con la vida de Correll? ¿O nunca supo nada al respecto?
