REINO UNIDO.- Un niño británico con cáncer terminal se aferró a la vida para conocer a su hermanita.
El pequeño niño murió a los nueve años de edad en la Nochebuena del pasado mes de diciembre, después de luchar contra el cáncer por 15 meses.
Bailey Cooper logró conocer a su hermanita con sus ganas y esfuerzo, tener a la bebé en sus brazos le dio fuerza durante su fatal enfermedad, sin embargo murió.
La familia de Bailey pasó una agridulce Navidad, estaban felices por que el menor conoció a su hermana pero el pequeño guerrero se fue de este mundo, así lo informó Telemundo.
El pequeño guerrero antes de fallecer ordenó algo difícil de cumplir a sus familiares, les pidió a sus padres que no lloraran más de 20 minutos, les dijo que no se valía llorar más porque tenía que cuidar a sus hermanos.
La madre del pequeño Bailey dijo que él escogió el nombre de su hermana antes de morir, la llamó Millie y alcanzó a tomarse una tierna fotografía con ella en sus brazos.