(SinEmbargo).– Familiares de al menos cuatro de las víctimas de la explosión de una toma clandestina de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Tlahuelilpan, Hidalgo, dieron el último adiós a sus seres queridos con una misa y acompañados de decenas de pobladores en el entierro.
De acuerdo con información publicada por medios nacionales, desde las 12:00 horas de este domingo, familiares de César Misael y Mario, tres de las 79 personas que murieron calcinadas el viernes pasado, se congregaron en la iglesia de San Francisco de Asís, ubicada en el centro de Tlahuelilpan, para una ceremonia religiosa de cuerpo presente.
El sacerdote que presidió la misa pidió por las 81 personas que continúan hospitalizadas en el Estado de México, Hidalgo y la capital del país. Además, llamó a fortalecer la unión entre las y los mexicanos.
Mientras que en Teltipán, un municipio cercano, habría sido enterrado otro hombre.
Los cuerpos de la mayoría de las víctimas mortales aún no han sido identificados, por lo que fueron sometidos a pruebas de ADN.
CNDH investigará posible negligencia
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) inició de oficio un expediente de queja para investigar las posibles omisiones en la actuación de servidores públicos, federales, locales y municipales, para controlar la fuga que presentaba el ducto en Tlahuelilpan, Hidalgo, así como para prevenir o intentar mitigar los riesgos de afectaciones a la población civil.
Lo anterior, precisó, “sin prejuzgar sobre posibles responsabilidades y reconociendo la necesidad y trascendencia de las acciones que lleva a cabo el Gobierno Federal contra la sustracción ilegal de combustible en los ductos de Pemex”.
En un comunicado, el organismo detalló que en cuanto tuvo conocimiento de la explosión en la toma clandestina, su personal se trasladó al lugar de los hechos para realizar gestiones y acciones de acompañamiento en el traslado de las personas heridas a hospitales. También brindó asesoría y orientación sobre la entrega de cuerpos a sus deudos, y proporcionó servicios de asistencia psicológica.
Asimismo, la CNDH señaló que mantiene presencia en carácter de observadores en las inmediaciones de la denominada “zona cero”, donde ocurrieron los hechos, y que estará pendiente de la evolución de los acontecimientos para en su momento emitir el pronunciamiento que conforme a derecho corresponda.
Por último, expresó sus condolencias y solidaridad a los familiares de las víctimas, así como su apoyo y acompañamiento a las personas que resultaron heridas en el incendio del pasado 18 de enero.
Jorge Alcocer, Secretario de Salud, dio a conocer esta mañana que la cifra de muertos por la explosión subió a 79 y que otras 81 personas continúan hospitalizadas. Además, precisó que hasta ese momento se tenían registradas 12 defunciones en los hospitales, dos altas por mejoría, y un alta voluntaria de un paciente que decidió salir del nosocomio.
Por su parte, el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, reveló que se aplicará extinción de dominio de los terrenos ligados al robo de combustible en todo el país para garantizar que no se repita un incidente similar.
A su vez, el funcionario dijo que quienes quieran ayudar a identificar a los culpables recibirán toda la protección necesaria. “Lo vamos a proteger”, afirmó en conferencia de prensa.
Anunció que hoy se realizarán trasladados de cinco a seis pacientes y se continuará con las visitas a los hospitales donde se busca tener relación y acompañamiento con los familiares. Gertz Manero recordó que aún se está en la ventana de 48 a 68 horas, en la que se tiene a los pacientes más graves en la Ciudad de México.
Indicó que hay pacientes graves con quemaduras de más del 80 por ciento y que tienen un pronóstico reservado. “En este cambio de sede, de haberlas trasladado, […] la gravedad puede ser diferente para los que no están en estas condiciones”, enfatizó.
