Erick Montalvo Salinas dejó en el desamparo a dos pequeñas de 6 y 8 años de edad.Su cuerpo es velado en su propia casa, en el municipio de García, tras el repentino y por demás inesperado fallecimiento.
Lo más dramático y escalofriante es que fue su propia madre quien le causó la muerte con un arma blanca.Ahora ella se encuentra en la cárcel, en espera de enfrentar a la justicia, mientras el resto de la familia se dispone a despedir en su última morada al joven de 28 años.
Los hechos que cobraron la vida de Erick, y que mantienen en prisión a Edith, de 49 años, ocurrieron la tarde del pasado lunes 16 de septiembre en la vivienda familiar.
El sitio se ubica en la calle Villa Venetto casi esquina con Villa di Trevi, en la colonia Villanova.
Varios miembros de la familia, entre ellos Edith, se encontraban tomando en el porche, mientras Erick, sobrio, comía con su esposa en la cocina.
En el transcurso de la tarde la mujer estuvo ingiriendo bebidas alcohólicas con otros familiares, a quienes les insistía que llamaran a su hijo para que tomara con ellos.
El joven se negó, y fue de ese modo como terminaron las cosas, pues la señora se molestó y comenzó a insultarlo, pero al no obtener respuesta de su hijo, terminó por atacarlo con un cuchillo.
Érick tuvo un desenlace fatal. En el sitio policías municipales interceptaron a la señora y la entregaron a las autoridades ministeriales.
Los restos del joven obrero, originario de Veracruz, son velados en su domicilio. Los vecinos de la colonia Villanova lo describieron como una buena persona.“Sí, sí… era muy tranquilo él.
Cuando nos conocimos por primera vez, aquí en la colonia, él venía aquí a la casa. Era muy tranquilo y no se metía con nadie”, comentó la joven señora Nayeli, quien radica en la misma calle.
Personas que conocen a Doña Edith la describieron como sumamente problemática y agresiva. Prácticamente a diario tomaba y comenzaba a insultar a los vecinos. Pese a ello, nunca imaginaron que fuera capaz de asesinar a su propio hijo.