MÉRIDA, Yucatán.- Ante la contingencia sanitaria por el coronavirus Covid-19, la Secretaría de Salud de Yucatán (SSY) distribuyó a los hospitales que atienden este padecimiento en el Estado, la lista de las funerarias autorizadas para el manejo y cremación de cadáveres que llegaran a fallecer por esta enfermedad, en caso de que se disponga este procedimiento, recomendado por organismos internacionales.
Hasta el momento, la entidad ha registrado ocho defunciones por el virus que emergió en Wuhan, China, en diciembre de 2019.
Las funerarias autorizadas por la SSY, ubicadas principalmente en el Centro Histórico de Mérida, García Ginerés y el municipio de Kanasín, ofrecen el servicio a costos que van de $6,500 a $14,000.
Aunque la Secretaría de Salud Federal, por medio del subsecretario de Salud, Hugo López Gatell, aseguró que no es necesario cremar los cadáveres de las personas que fallezcan por el Covid-19, porque la transmisión del coronavirus es respiratoria y no emanan elementos infecciosos, ya se cuenta con protocolos para el manejo de los cadáveres que incluyen la cremación, ya que si bien no es un procedimiento obligatorio, si se recomienda como disposición final por organismos internacionales.
De acuerdo con el documento “Manejo de cadáveres en el contexto del nuevo coronavirus (Covid-19)” emitido de manera conjunta por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), los fallecidos por Covid-19 pueden ser enterrados o cremados verificando los requisitos estatales y locales que pueden dictar el manejo y disposición de los restos de personas que han muerto por este padecimiento.
El manejo de un cuerpo bajo protocolo de coronavirus exige medidas estrictas que van desde el equipo de protección que hay que utilizar, hasta las recomendaciones para su traslado y tratamiento, y procesos de desinfección. Todo ello con la finalidad de prevenir contagios.
Los procedimientos de seguridad para las personas fallecidas infectadas con una enfermedad respiratoria aguda (IRA), incluida Covid-19, deben ser coherentes con los utilizados para cualquier procedimiento de autopsia.
La guía establece que en general, los peligros conocidos del trabajo en la sala de autopsias parecen surgir del contacto con materiales infecciosos y, en particular, de salpicaduras en las superficies corporales de los trabajadores sanitarios en lugar de por inhalación de material infeccioso.
Sin embargo, si un paciente con Covid-19 murió durante el período infeccioso, los pulmones y otros órganos todavía pueden contener virus vivos, y se necesita protección respiratoria adicional (N-95 o respiradores equivalentes) durante los procedimientos que generan aerosoles de partículas pequeñas (por ejemplo, el uso de sierras eléctricas y el lavado de intestinos). Por lo tanto, los exámenes post mortem de pacientes con Covid-19 merecen especial precaución.
El manejo de los cadáveres
Embalaje y transferencia del cuerpo de fallecidos por Covid-19 desde la sala la habitación / sala de aislamiento u otro entorno a una funeraria, crematorio o entierro:
1. Hay que asegurar que el personal mortuorio y el equipo funerario apliquen precauciones estándares en todo momento (es decir, realizar la higiene de las manos, la limpieza ambiental) incluido el uso adecuado de Equipo de Protección Personal (EPP), como delantal de manga larga, guantes y protección facial si existe riesgo de salpicaduras de líquidos corporales del paciente o secreciones en el cuerpo o la cara del miembro del personal.
2. Los sacos mortuorios no son necesarios para empacar el cuerpo. Envuelva el cuerpo en un paño o cualquier otro tejido para transferirlo y retírelo lo antes posible a la zona mortuoria.
3. Mantener el movimiento y el manejo del cuerpo en mínimo.
4. Los requisitos de EPP para el equipo de transporte (si hay cambio del equipo que hace el embalaje del cuerpo) incluyen guantes y bata/delantal.
5. No se requiere ningún vehículo especial.
Cuidado mortuorio
1. Cuando la preparación del difunto (por ejemplo, limpieza del cuerpo, ordenamiento del cabello, recorte de las uñas y afeitado) use el EPP apropiado (guantes, bata, máscara, protección para los ojos).
2. El personal de la funeraria y los directores funerarios deben ser informados del riesgo biológico.
3. Aplicar principios de sensibilidad cultural. Si la familia del paciente desea ver el cuerpo después de su extracción de la sala de aislamiento o área relacionada, se le puede permitir hacerlo con las siguientes precauciones estándar en todo momento, higiene de las manos. Dé a la familia instrucciones claras de no tocar ni besar el cuerpo.
4. Las bolsas de cadáveres vacías deben eliminarse como residuos infecciosos. 5. No se recomienda el embalsamamiento.
Fuente: Manejo de cadáveres en el contexto del nuevo coronavirus (COVID-19)/Organización Mundial de la Salud (OMS)/ Marzo 2020.
Sipse.