ESTADOS UNIDOS.- Egresado de la escuela de medicina de Nueva
York, médico de urgencias durante treinta años. Inventó en 1994 un sistema de
imágenes para enseñar a intubar, el procedimiento de insertar tubos de
respiración. Voluntario en el Hospital Bellevue para apoyar en la contingencia
sanitaria derivada por la pandemia de coronavirus. Hoy en día referente en
cuanto al hallazgo del síntoma asesino y silencioso del Covid-19.
Se trata del doctor Richard Levitan, quien relató
al The New York Times, que durante su estancia en el hospital en donde se formó
como profesional descubrió la consecuencia letal del coronavirus que ataca
sin que el enfermo lo note, lo que describió como: "hipoxia
silenciosa".
El galeno aseguró al medio internacional que la
neumonía es una infección de los pulmones en la que los alvéolos, o sacos de
aire en los pulmones, se llenan de fluido o pus. Por lo general, los pacientes
desarrollan molestias en el pecho, dolor al respirar y otros problemas
respiratorios. Sin embargo, cuando la neumonía por Covid-19 ataca por primera
vez, los pacientes no sienten que les falta el aire, aun cuando sus
niveles de oxígeno caen. Y para cuando tienen esa sensación, presentan niveles
de oxígeno alarmantemente bajos y una neumonía de moderada a grave (como se ve
en las radiografías de tórax).
“La saturación normal de oxígeno para la mayoría de las
personas al nivel del mar es del 94 al 100 por ciento; los pacientes con
neumonía por Covid-19 que atendí tenían saturaciones de oxígeno tan bajas que
llegaban al 50 por ciento”, relató Levitan.
En los departamentos de urgencias intubamos a los pacientes
que se encuentran en un estado crítico por diversas razones. No obstante, en
mis treinta años de práctica, la mayoría de los pacientes que requieren
intubación de emergencia están en estado de choque, tienen un estado mental
alterado o resoplan para respirar. Los pacientes que requieren intubación
debido a la hipoxia aguda a menudo están inconscientes o utilizan todos
los músculos que pueden para respirar. Están en una situación de extrema
presión. Los casos de neumonía por Covid-19 son muy diferentes, aseveró el
galeno.
La gran mayoría de los pacientes de neumonía por Covid-19
que conocí tenían una saturación de oxígeno notablemente baja en el triaje,
aparentemente incompatible con la vida, pero todavía usaban sus teléfonos
celulares mientras los conectabamos a los monitores. Aunque respiraban
rápido, no parecían estar sufriendo demasiado, a pesar de los niveles
peligrosamente bajos de oxígeno y la terrible neumonía que mostraban sus
radiografías de tórax, informa Richard al tabloide americano.
El infectado por Covid-19 se lesiona los pulmones al
respirar cada vez más fuerte
Según el doctor el coronavirus ataca a las células
pulmonares que producen surfactantes. Esta sustancia ayuda a mantener los
alvéolos abiertos entre las respiraciones y es fundamental para la función
pulmonar normal. Cuando comienza la inflamación de la neumonía por
Covid-19, esta provoca que los alvéolos se colapsen y que los niveles de
oxígeno caigan. Sin embargo, los pulmones inicialmente siguen “respondiendo”,
todavía no están rígidos ni llenos de líquido. Esto significa que los pacientes
todavía pueden expulsar dióxido de carbono y dado que el dióxido de carbono no
se acumula, los pacientes no sienten que les falta el aire.
Los pacientes compensan el bajo nivel de oxígeno en su
sangre respirando más rápida y profundamente, lo cual sucede sin que se den cuenta.
Esta hipoxia silenciosa, y la respuesta fisiológica del paciente a la misma,
causa aún más inflamación y el colapso de más alvéolos, y la neumonía empeora
hasta que los niveles de oxígeno se desploman. De hecho, el paciente
se lesiona los pulmones al respirar cada vez más fuerte. El 20 por ciento de
los pacientes con neumonía por Covid-19 pasa a una segunda fase más mortal de
lesión pulmonar. El líquido se acumula y los pulmones se vuelven rígidos, el
dióxido de carbono se eleva y los pacientes desarrollan un fallo respiratorio
agudo.
El médico afirma que hay una forma de identificar a más pacientes que tienen neumonía por Covid-19 más pronto y tratarlos con más eficacia, y no requeriría esperar a una prueba de coronavirus en un hospital o consultorio. Se necesita la detección temprana de la hipoxia silenciosa a través de un dispositivo médico común que se puede comprar sin receta en la mayoría de las farmacias: un oxímetro de pulso o pulsioxímetro, aunque más frecuentemente se le llama solo oxímetro.